ENTREVISTA  A CARMEN OMONTE VICEPRESIDENTA DEL CONGRESO.
ENTREVISTA A CARMEN OMONTE VICEPRESIDENTA DEL CONGRESO.

Renunció a APP y mantiene la distancia con sus exlíderes Alejandro Toledo, Ollanta Humala y César Acuña. Desde su nueva vida en Madrid, la exministra de la Mujer y exvicepresidenta del Congreso le sugiere al primer ministro ampliar la convocatoria al gabinete.

¿Cómo se ve la coyuntura peruana desde España?

La ventaja de estar alejada es ver la situación con un poco menos de pasión. Dina Boluarte se debe mantener en el cargo a pesar de la ineficiencia de su gestión. La cura saldría peor que la enfermedad. Mejor es no aferrarse a esa esperanza porque aún no se vislumbran liderazgos claros ni organizaciones partidarias más consolidadas para el recambio. Sin eso, lo más sensato es que ella culmine su gobierno. Pero que tenga mejor muñeca y sepa tener un liderazgo mucho más amplio y grande donde no se fomente el encono que cada vez crece más. Creo que la deslegitimización del otro es un mal que nos está corroyendo cada vez más.

¿Vería con simpatía algunos cambios hacia 28 de julio?

Los cambios deberá analizarlos con Alberto Otárola, evidentemente. Es difícil definir nombres. Habría que ver cómo amplían a este gobierno para que sea convocante. La polarización no solo reina en nuestro Perú. Estamos en un ciclo de extremos. Por un lado, una izquierda extrema que triunfa en algunos espacios. Y por el otro, una derecha extrema que tiene más oportunidades de llegar al poder que hace algunos años. El centro, la sensatez y el consenso están opacados. Y eso es peligroso. Pero si se hiciera el ejercicio de poner por delante al país, se decidirían por tener un gabinete de consenso y político. Cada cierto tiempo en Perú tenemos la costumbre de invocar a un gabinete técnico. No coincido con ese criterio. No se puede despreciar lo político por lo técnico. Debe buscarse un gabinete político pero buscando la eficiencia en la gestión.

¿Cuál debería ser la prioridad a nivel del gobierno?

La prioridad para el país debería ser ahora el Fenómeno de El Niño. Acabo de leer que los gobiernos regionales del norte tienen un nivel mínimo de ejecución en cuanto al presupuesto de prevención del Fenómeno de El Niño. ¿Qué se puede hacer entonces con algo tan urgente? Es algo de corto plazo. Estamos distraídos en confrontaciones y se nos está yendo el tren. Cinco años no son poca cosa.

Hablaba de la polarización. La izquierda acaba de perder electoralmente en mayo, tanto en Chile como en España.

Acaban de ser las elecciones municipales en España. Y acaban de hacer la ceremonia de la toma de mando. A diferencia de lo que sucede en nuestro país, muchos candidatos que habían logrado hacerse del triunfo han tenido que llegar a negociaciones y conversaciones con las diversas fuerzas políticas. En el caso de Barcelona, por ejemplo, el que ganó las elecciones no asumió el mando, sino el segundo, que logró un mayor consenso entre los regidores. No es una democracia perfecta y ninguna lo es. Pero se logra un buen resultado porque lo que busca es la gobernabilidad. Y eso es precisamente lo que nos está faltando desde hace tres períodos presidenciales.

Cerrar pactos en lugar de deslegitimar al otro.

Estamos en la era de la inmediatez. Uno creería que ese concepto solo se aplica a la tecnología, pero nos afecta en todos los ámbitos. Los ciclos políticos son cada vez más cortos. El centro ha perdido en general. Y en el Perú se busca la invalidación del otro. La capital vs. el sur. Lima contra las provincias. Un lado busca descalificar al otro como peruano. Damos vueltas en ese ciclo.

¿Qué le parece el rol que tiene APP? ¿Conoce al flamante ministro de Salud?

Yo renuncié al partido antes de viajar a España. Hace un tiempo tomé la decisión de residir acá con mi familia. Al haber nacido en las regiones, APP debería tener un rol más concreto en la búsqueda de consensos para llevar desarrollo a provincias. Pero no solo es APP. Ningún partido lo está haciendo. No se están buscando los puntos en común. No veo liderazgos. La única que ha salido a hablar claramente es Keiko Fujimori.

¿Qué le parece su posible candidatura presidencial?

Democráticamente, ella tiene todo el derecho de postular. Pero sí es importante que vea el bosque y analice su rol dentro del proceso electoral. Lo que nos dice la experiencia es que, al polarizar tanto, esa candidatura ha logrado que triunfe el antifujimorismo.

¿Cómo analiza el proceso que se le sigue a su exlíder Alejandro Toledo?

No tengo ningún contacto con él ni su entorno. Lo que corresponde es que la justicia no solo sea efectiva en cuanto a la extradición y sus logros, sino también en cuanto a los plazos y tiempos. La percepción de la ciudadanía es que estos procesos se dilatan tanto a favor como en contra de los procesados. Además, hay otras prioridades en el país. El litio, la seguridad, la infraestructura…

Usted fue vicepresidenta de Fredy Otárola. Conoce a la familia y al entorno humalista.

Desde que salí del Congreso no tengo comunicación con Fredy Otárola. Lo aprecio. Con respecto a Alberto (Otárola), sé que la experiencia que tiene le podrá servir para ampliar la convocatoria. Creo que su postura ahonda la polarización. Yo hubiera pensado que su convocatoria iba a ser más de centro. Sería bueno si hubiera muchos exhumalistas en el gobierno. Hubo muchos logros en ese gobierno y un horizonte más claro. Lo que le falta a este gobierno es un horizonte.