El amor los fortalece en la primera línea de batalla, se conocieron en la Facultad de Medicina de la Universidad de La Plata (Argentina) y ahora todos los días enfrentan a la pandemia del COVID-19 en la región Piura. Esta es la historia de dos médicos intensivistas del Hospital Santa Rosa, quienes comparten su amor y a la vez salvan vidas.
Se trata de la piurana Elsa Rivas y su esposo Carlos Alberto Carriqueo, ambos intensivistas, especialidad donde recaen muchas vidas y tienen que poner todo su esfuerzo para lograr recomponer la salud del paciente crítico.
“Cuando dicen que se está dejando de lado a los ancianos, es una falacia. Hemos tenido pacientes mayores de 80 años en cuidados críticos. Pero es verdad que cuando ya no tenemos camas disponibles, tenemos que hacer un triaje (evaluación para medir la capacidad de sobrevivencia del paciente) y en base a eso tomamos una decisión. De hecho, no es una decisión fácil”, declaró a Pirhua.pe, el también jefe de la UCI COVID del Santa Rosa, Alberto Carriqueo.
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Por su parte, Elsa Rivas narra que todos los días luchan contra la muerte, debido a que tienen que entubar y revisar constantemente a los enfermos. “La demanda es grande y el sistema es muy precario”, relata Elsa Rivas, quien también revela que es doloroso pensar que ambos puedan llegar a morir.
Sin embargo, ellos no se quejan de su profesión porque la escogieron para salvar vidas, ahora solo les queda combatir, y el combustible convertido en esperanza es simplemente ver que sus pacientes salgan recuperados del nosocomio.