Lanzan campaña para un futuro sin violencia para las niñas y adolescentes en el país

En el Perú las niñas y mujeres enfrenten distintos tipos de violencia; el matrimonio infantil, catalogado como una violación de los derechos de las mujeres, es una de ellas. A nivel mundial, una de cada cinco niñas se casa o convive antes de cumplir los 18 años. En países menos desarrollados, esta problemática afecta al 36% de las niñas antes de alcanzar la mayoría de edad, y un 10% de ellas son menores de 15 años.

En ese contexto, Plan International lanza su nueva campaña, “La Novia Prohibida”, en defensa de un futuro sin violencia para las niñas y adolescentes del Perú que son forzadas a contraer matrimonio o uniones tempranas, lo cual va en contra de sus derechos.

El Proyecto de Ley N°3194/2022, que busca eliminar el matrimonio infantil en el Perú, fue aprobado por el Congreso. Sin embargo, aún no se ha publicado, por lo que no ha entrado en vigor.

Entre los años 2012 y 2022, se han registrado más de 4,357 matrimonios de menores de 18 años en Perú, según datos proporcionados por el Reniec. De manera preocupante, más de 400 de estos casos involucran a menores de 16 años, revelando una situación alarmante de persistencia del matrimonio infantil en la región.

Un estudio conjunto realizado por Plan International y UNFPA “Las adolescentes peruanas en matrimonio o unión. Tradiciones, desafíos y recomendaciones” en 2019 destacó que el 28% de las mujeres entre 15 y 49 años en Perú comenzaron a convivir cuando eran menores de 18 años.

Este tipo de matrimonio implica que las niñas se casan sin su consentimiento, en contra de su voluntad o sin la posibilidad de abandonar la unión.

Las amenazas y acciones de violencia asociadas a esta práctica abarcan desde la violencia física, violencia sexual, hasta la violencia psicológica, que incluye también la presión psicosocial del entorno cercano: las familias y la comunidad.

“Estas situaciones, documentadas en diversos estudios y registros, demuestran una vulneración significativa de los derechos fundamentales de las niñas y las mujeres”, añadió Veronique Henrry, directora país de Plan International.

En este contexto, Plan International presenta la campaña de sensibilización ‘La Novia Prohibida’. A través de un experimento social en la vía pública, buscó involucrar a la ciudadanía sobre el impacto negativo del matrimonio infantil, el cual no solo afecta la integridad física y emocional de las niñas, sino que también tiene repercusiones a largo plazo en su acceso a la educación y desarrollo personal.

“La imposición de roles matrimoniales a una edad temprana interrumpe las oportunidades educativas de las niñas, perpetuando un ciclo de pobreza, violencia, embarazos tempranos y múltiples, limitando sus perspectivas de futuro”, añadió Henry.

La urgencia de abordar este problema radica no solo en la protección de los derechos inmediatos de las niñas, sino también en la creación de entornos que fomenten su crecimiento, educación y empoderamiento a lo largo de sus vidas.

La representante de la ONG expone los principales tipos de maltrato y violencia presentes en el matrimonio infantil y las uniones tempranas forzadas, así como sus consecuencias.

Mira: Congresista Héctor Acuña sobre el cuestionado bono de S/9,900: “Sí” lo merezco

Maltrato Físico: El matrimonio infantil forzado expone a las niñas a un mayor riesgo de maltrato físico. Al ser obligadas a casarse en una edad temprana, estas jóvenes a menudo carecen de la madurez necesaria para afrontar las responsabilidades del matrimonio. Esto puede llevar a situaciones de violencia física por parte de sus esposos o familiares, ya que las niñas pueden ser percibidas como más vulnerables y menos capaces de defenderse. Las consecuencias del maltrato físico incluyen lesiones, trauma emocional y un entorno doméstico peligroso.

Abuso Sexual: El matrimonio infantil forzado también aumenta significativamente el riesgo de abuso sexual. Las niñas casadas a una edad temprana pueden ser objeto de relaciones sexuales no consensuadas, ya que a menudo carecen del poder y la autonomía para negarse. Esta situación lleva a un mayor riesgo de infecciones de transmisión sexual, embarazos no deseados y complicaciones de salud asociadas con la actividad sexual precoz. El abuso sexual contribuye a un ciclo de vulnerabilidad y trauma que puede tener efectos a largo plazo en la salud mental y emocional de las niñas.

Maltrato Psicológico: El matrimonio infantil forzado también está vinculado al maltrato psicológico. Las niñas obligadas a casarse a una edad temprana a menudo experimentan un desequilibrio de poder en la relación matrimonial, lo que puede dar lugar a formas de control y manipulación emocional. El maltrato psicológico puede incluir amenazas, humillaciones, restricciones en la toma de decisiones y el aislamiento social. Estas prácticas contribuyen a la desvalorización de la autoestima de las niñas y afectan negativamente su bienestar emocional y mental.

Interrupción de la educación: mientras más temprana es el matrimonio o la unión infantil forzada, menos años de estudios completen.

Perpetuación de la pobreza: existe una relación estrecha entre pobreza y matrimonio o unión temprana. Según estudio de Plan International y UNFPA, 7 de cada 10 mujeres que se unieron o casaron tempranamente son pobres o muy pobres.

Menor autonomía económica: 3 de cada 4 mujeres unidas o casadas tempranamente se dedican al trabajo doméstico.

VIDEO RECOMENDADO