Claudio Espinoza, el primer peruano campeón mundial de matemática en el 2003, lucha por su vida debido a una tuberculosis miliar que lo tiene postrado en una cama del hospital Hipólito Unanue y pesando un poco más de 35 kilos.
Hace cuatro años, al no tener recursos económicos — ya que su padre es mototaxista y su madre, empleada del hogar— él postuló y ganó una beca para estudiar un doctorado en el Instituto Nacional de Matemática Pura y Aplicada de Brasil, tras culminar su carrera y una maestría de Matemática Pura en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
La beca solo cubría los dos primeros años, algo que su familia no sabía. Claudio Espinoza evitó gastar el dinero que le entregaban para su alimentación a fin de ahorrar y financiar su estadía en los otros dos años del doctorado. Eso perjudicó su salud.
"Jamás pensé que estuviera abandonado y que ya no tenía beca ni nada. Él ahorraba toda su plata y de eso sobrevivía para pagar su cuarto", cuenta entre lágrimas Regina Choquepura, madre del genio de las matemáticas.
Al regresar al Perú el 11 de febrero, el genio de matemáticas solo pesaba 35 kilos y apenas se sostenía. Fue internado en el hospital Hipólito Unanue, donde se confirmó el diagnóstico. La tuberculosis miliar es una de las infecciones más graves porque se expanden de los pulmones a otros órganos.