El escándalo de este personaje ‘Chibolín’ va a traer cola en la alicaída clase política, porque por angas o por mangas muchos de los conspicuos representantes de los partidos políticos en el poder estuvieron desfilando por su programa televisivo sabatino, por cierto, una mala copia del recordado Trampolín a la Fama.
‘Chibolín’ es un personaje cómico que se mimetizaba muy bien con diversos personajes de la farándula, evidentemente por lo hilarante y estrafalario de la puesta en escena. Hoy, ese mismo personaje se ha mimetizado con varios personajes de nuestra “fauna política”, que ávidos por tener cobertura mediática en el dichoso programa televisivo, desfilaban cada sábado maquillando sus alicaídas imágenes públicas, para mostrarse magnánimos y hasta supuestamente altruistas con el público.
Porque eso tenía ‘Chibolín’, un instrumento mediático que llegaba a amplios sectores populares y hacía un espectáculo circense aprovechándose de la pobreza y la necesidad, apelando al morbo; el resultado era evidente, un éxito televisivo que ahora sabemos era bien aprovechado porque toda esa puesta en escena tenía otros fines subrepticios.
No importaba el color político, lo que interesaba era el oportunismo para seguir haciendo espectáculo barato, como aquella ocasión que junto al presidente Castillo lanzaron un programa de lucha contra el cáncer, exponiendo a niños con esta penosa enfermedad que jamás recibieron la atención del Estado. Otro caserito era el alcalde de Lima, que hasta se desgañitaba en los elogios y autobombos, vendiéndose como un empresario exitoso y maquillando el fracaso de su gestión municipal.
Hoy todos estos personajes guardan silencio o pretenden deslindar con este “rey Midas” de la farándula chicha, porque se ha descubierto un tinglado de tráfico de influencias con coimas de por medio, donde ‘Chibolín’ realizaba la labor de operador. Qué fácil es volverse un traficante de favores, una especie de gestor de intereses, cuando tienes cobertura mediática y cierta imagen pública que te permite mimetizarte en el mundo de la política y la farándula.
El affaire ‘Chibolín’ va a traer cola, porque esta historia rocambolesca tiene muchas aristas que involucra a los más connotados personajes políticos de nuestra venida a menos clase política, que se emocionaba cada sábado tratando de aparecer en el programa, de muy alta audiencia, pero que denigraba la condición humana y que lamentablemente solo era la estrategia para el negociado y el tráfico de favores.