Puro goce

Aunque en Lima el sol se resiste a salir, en Máncora este no decae nunca. Hacia allá fuimos en busca de luz y de los potajes del Máncora Marina Hotel.

El Perú es un lugar ideal para vivir y comer. Lo tenemos todo, y no nos cansaremos de repetirlo: hermosas playas, bellas campiñas andinas, deslumbrantes parajes selváticos, y si de comida se trata, las opciones son infinitas.

Pero a nosotros nos gusta la cocina de ingrediente y, en esas lides, el norte del Perú es campeón. Y es que no es necesario complicarse para obtener platos deliciosos: el mar provee, la tierra provee… solo se necesita un cocinero competente. Y, en Máncora, en el Máncora Marina Hotel, la oferta es sucinta pero sabrosa. Su tiradito es un canto a la simpleza hecha gloria con un bocado. Su cebiche, un himno a los placeres del mar (y a sus ingredientes: pulpo, langostinos, calamares), y aunque su tartar no es tan 'tartar' (al menos al estilo 'clásico'), sí resulta sabroso, pues en la zona abunda el atún, esa maravilla que ya nos es costumbre.

El hotel mismo, con su piscina 'infinita' (a primera vista se conecta con el mar) y sus blancas habitaciones (donde siempre es posible mirar al mar), es una invitación al goce, al relax y a la paz. Eso sí, busque buena compañía. Los placeres son mejor de a dos.

DATO

- El Máncora Marina Hotel está en La Panamericana Norte km 1215, Máncora, Pocitas, Piura. Reservas: (51) 73- 258614 y 972-702-837.

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