Estas cifras pueden impactar a cualquiera: 449 niñas y adolescentes entre 10 y 14 años años y más de 20 mil entre 15 y 18 años, han sido madres en solo estos primeros meses del 2024, según el Sistema de Registro del Certificado de Nacido Vivo en Línea (CNV). Seguramente, muchos de esos embarazos, fueron no deseados.
No vamos a detenernos en un análisis de si esta cifra es mayor o menor que las del año pasado o si son más o menos que en otros países. Solo quisiera que nos detengamos un momento y podamos reflexionar sobre el impacto de este embarazo en la vida de estas niñas y adolescentes.
Será una niña o adolescente que tendrá que pasar por un embarazo de nueve meses, por un parto natural o por cesárea, que seguramente no podrá continuar con sus estudios en la escuela porque será rechazada por las familias y sus propias compañeras o porque tendrá que dedicarse al cuidado de su bebé la mayor parte de su tiempo. Esto traerá consecuencias negativas en su futuro como problemas de inserción económica.
¿Por qué no somos capaces como país de bajar estas cifras a un mínimo o a cero? Un estudio realizado en base a la data del programa Niños del Milenio en el Perú, existe una causa importante que podemos atacar claramente: Ir a la escuela, permanecer en ella, y que a una niña le vaya bien, hace que sea menos probable que sea una madre en la adolescencia. Esta debe convertirse en una política de Estado en la que todos los gobiernos deberían enfocarse.
Un segundo punto, de corto plazo, es garantizar que las agresiones sexuales sean castigadas. Se puede disminuir el número de agresiones con medidas, no solo duras para los agresores, sino realizando la investigación necesaria y que los agresores realmente lleguen a ser castigados por su delito, la impunidad tiene como consecuencia el aumento del número de víctimas y de agresores.
Podríamos decir que son políticas difíciles de ejecutar, pero, por lo contrario, deberíamos decir que son políticas que reclaman urgencia de ser ejecutadas. Las niñas y las adolescentes necesitan que cuidemos de su futuro.