El periodista Jaime de Althaus publicó una imagen en Twitter que decía “Si mandan a Vela y Domingo Pérez a negociar con Chile por Arica, vuelven sin Tacna…”, en referencia a la demanda de Odebrecht contra el Estado peruano.

Aquella frase ha sido motivo de enojo por parte de los fiscales mencionados, puesto que Pérez acusó a De Althaus de no ser imparcial y de tener una inclinación ideológica hacia el fujimorismo, por no haber estado de acuerdo con la disolución del Congreso.

Lamentablemente, aquella declaración es una falacia, puesto que el no estar de acuerdo con la disolución del Congreso no lo hace a uno fujimorista. Asimismo, diversas personalidades criticaron al periodista por su publicación, argumentando que De Althaus pretendía obstruir la investigación.

Lamentablemente, en el Perú imperó durante mucho tiempo la impunidad y la corrupción en todos los niveles del Estado, y fue el escándalo Odebrecht el que remeció la estructura de una maquinaria gubernamental mercantilista corrupta. Es por ello que, con el surgimiento del equipo especial Lava Jato (EELJ), la indignación ciudadana se ha convertido en esperanza.

Y el EELJ está haciendo un buen trabajo que debe ser protegido de quienes buscan perjudicarlo y evitar que se conozca la verdad. Pero defender al EELJ no significa que sus miembros tienen que estar exentos de críticas o burlas, dado que, definitivamente, se debe reconocer que hubo errores y declaraciones desafortunadas por parte de los fiscales.

Es por ello que no se puede etiquetar de fujimorista a todo aquel que critique su actuación, puesto que aquello, en vez de generar un clima de estabilidad para las investigaciones, contribuye a generar escaramuzas que son aprovechadas por quienes tienen turbios intereses en estropear la investigación.