[Opinión] Patricia Teullet: Pegada con chicle. (Foto: Presidencia)
[Opinión] Patricia Teullet: Pegada con chicle. (Foto: Presidencia)

La asociación de ideas puede funcionar de manera muy extraña, llevándonos por rutas aparentemente sin lógica. Me pasó esta semana debido al Día de la Madre. Recordé una anécdota de la mía: en ese entonces se vendían cachorros en la avenida Larco, supuestamente de raza y, aun así, poco importaba. Todos los cachorros son lindos. Así, en una compra impulsiva mi madre compró un hermoso animalito, con expresión atenta y las orejas bien paraditas. Poco después se dio cuenta de que esas orejas se mantenían atentas porque estaban pegadas con chicle. En realidad, no importaba: el animalito era tierno e inteligente.

Y allí se fue mi asociación de ideas: cientos de miles de quienes votaron por este gobierno, lo hicieron pensando que era la mejor opción: ‘liderado’ por un provinciano, de origen humilde, pero educado y con (supuesta) capacidad para entender y querer sacar de la pobreza a quienes aún la sufren. El problema fue que muy poco después encontramos que también esa imagen estaba, al igual que las orejas, pegada con chicle y que, en este caso, aunque el Congreso haya decidido quedárselo, no será por tierno ni inteligente, solo por conveniente.

Ejecutivo y Legislativo están demostrando que es fácil echarse abajo un país y perder lo avanzado. Bastan pequeños pasos: unos sutiles, otros no tanto. El aparato estatal se llena de incompetentes que no pueden impedir el vencimiento de vacunas, comprar y otorgar pasaportes ni brindar de manera fluida servicios a los que tenemos derecho. ¿Qué pasará cuando, al igual que los pasaportes, deje de haber DNI disponibles? Nos convertiremos en prisioneros dentro de los límites de nuestras fronteras. El deterioro institucional pasa factura todos los días a los ciudadanos.

Las consecuencias las vemos también en la incapacidad para realizar obras públicas de infraestructura o atraer inversión privada para generar crecimiento y empleo.

Asimismo, con la complicidad del Congreso, se aprueban medidas populistas que comprometen seriamente la viabilidad de un mejor futuro para los peruanos: desde avalar la estafa de universidades cuyos jóvenes graduados, después del sacrificio de años, no encontrarán un empleo que justifique el esfuerzo, hasta permitir que, al final de su vida laboral, no puedan contar con una pensión al jubilarse. Círculo completo.

Lea mañana a: Felipe morris