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[Opinión] Richard Arce: “La política de la chaveta”
La decisión de plantear la cuestión de confianza del premier Aníbal Torres es la respuesta inmediata del Ejecutivo frente a la admisión a trámite de la denuncia constitucional de la Fiscal de la Nación contra el presidente Pedro Castillo.
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La decisión de plantear la cuestión de confianza del premier Aníbal Torres es la respuesta inmediata del Ejecutivo frente a la admisión a trámite de la denuncia constitucional de la Fiscal de la Nación contra el presidente Pedro Castillo.
Puesto que la admisión a trámite de la acusación constitucional es trascendental, al saltar el artículo 117 de la Constitución habilita la posibilidad de acusar al presidente en función, por los presuntos delitos de corrupción que habría cometido.
La cuestión de confianza tiene por objetivo poner en jaque al Congreso; por eso fue singular observar la cara de sorprendidos de varios congresistas, al extremo que la única reacción del presidente del Congreso, José Williams, fue suspender la sesión hasta la tarde.
Todo esto en una muestra de desconocimiento de las prácticas parlamentarias y sobre todo la falta de experticia para responder políticamente al premier Torres, porque como ocurrió en horas de la tarde, simplemente se pospuso la discusión de la cuestión de confianza para la próxima sesión del pleno.
Que se tenga en claro que no es ninguna negación fáctica la respuesta que dio el presidente del Congreso, porque ya existe una Ley que ha puesto los límites posibles para plantear una cuestión de confianza.
Todo este triste espectáculo que estamos siendo testigos, es en realidad la puesta en escena de una lucha fratricida del Ejecutivo y el Legislativo, porque no hay ninguna vocación con los intereses del país, porque evidentemente al presentar dos propuestas distintas de cuestión de confianza, en una semana evidencia que son otros los objetivos que tiene el Ejecutivo.
El Congreso no debería quedarse atrás, porque ante esta situación debería proceder con la moción de vacancia; pero no lo van a hacer porque están más preocupados en cómo se aferran a sus curules.
Esta política de “la chaveta” recién empieza, en los próximos días, con presencia de la OEA, continuará la telenovela.
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