[Opinión] Juan Stoessel: ¿Turismo con fronteras cerradas?

Parece broma. Tenemos un nuevo tratado con la Comunidad Andina para facilitar el tránsito vehicular entre los países miembros, pero en simultáneo las fronteras siguen cerradas. Reabrirlas es vital. Sobre todo para las regiones limítrofes que dependen económicamente del turismo. Tacna recibía 5,000 visitantes de Chile al día, que le aportaban más de US$11 millones mensuales. Las playas del norte atraían multitud de veraneantes ecuatorianos. Todos esos ingresos hoy brillan por su ausencia. ¿Y por qué razón? Por seguridad sanitaria no es. Si ya recibimos una migración sin mayores controles, dejemos pasar también a los turistas y sus divisas.

Tenemos trabas por tierra, pero también por aire. Los aforos en aeropuertos no se flexibilizan. Como resultado, el número de vuelos domésticos está a tope –pese a que estamos al 50% que en prepandemia (como referencia, Ecuador y Colombia ya están al 90%). La escasez de vuelos merma nuestra capacidad de recuperar volúmenes e impacta en el costo de los pasajes. Esto perjudica tanto al turista, como al local que necesita viajar por motivo de estudios, familia o trabajo. Tampoco ayuda que los aeropuertos regionales tengan sus proyectos de ampliación encarpetados hace una eternidad, sin que las autoridades los aprueben. ¡En algunos casos la espera va durando 10 años!

La industria turística enfrenta suficientes desafíos, como para que nos añadan obstáculos. Queremos reactivarnos, necesitamos reactivarnos. ¡Apertura de fronteras ya!