[OPINIÓN] Ana Jara: “Insuficientes cambios ministeriales”. (Foto: GEC)
[OPINIÓN] Ana Jara: “Insuficientes cambios ministeriales”. (Foto: GEC)

Estas son mis primeras impresiones luego de haberse renovado parcialmente el gabinete Otárola. Resalto el gesto político hacia esa población femenina que representa el 50.4% de la población total del Perú, su conformación paritaria, pues once de diecinueve carteras ahora serán lideradas por mujeres. Bien por esto. Democracia es IGUALDAD. Ahora bien, pese a saberse que los ministros son fusibles, que pueden gozar de muchas prerrogativas pero no de certidumbre de permanencia en el cargo, porque el mismo día que prestan juramento llevan bajo el brazo su carta de renuncia, no deja de llamar la atención la “oportunidad” en que se producen los recambios de ministros, lo cual da pie a conjeturas y especulaciones como el de la abrupta salida de la titular del Ministerio de Educación, Magnet Vásquez; ello más allá de haber asistido a la ceremonia de juramentación de su sucesora Miriam Ponce, nada menos que su exviceministra de Gestión Pedagógica, para aparentar haber quedado en buenos términos con la presidenta Boluarte. Para la opinión pública, esta salida obedecería al hecho de haber osado defender la meritocracia de la carrera pública magisterial en contravención de la posición mayoritaria de las bancadas del Congreso en su pretensión de reponer a catorce mil docentes interinos carentes de título profesional y jalados en la evaluación de 2014, un despropósito que de promulgarse afectaría la calidad educativa de las nuevas generaciones estudiantiles del país, además de constituir un trato desigual y, por ende, discriminatorio con los docentes titulados de nota aprobatoria en las evaluaciones. Esperemos que la actual ministra mantenga la misma postura de quien le antecedió.

Estimo insuficientes los cambios ministeriales para oxigenar al Ejecutivo, el avance del gasto público marcha a paso de tortuga pese a lo delicado de la coyuntura, Ad portas de fenómenos climatológicos que traerían lluvias de fuerte a moderada intensidad y la recesión económica que requiere de una diligente y oportuna ejecución presupuestal para dinamizarla a falta de inversión privada y encima una aún no asumida crisis alimentaria cuyos efectos nefastos debieron prevenirse. Se suponía que a la caída del golpista Castillo fueran convocados mejores cuadros técnicos que no llegaban al cargo para aprender, sino para resolver problemas en función del bienestar general del país, pero brillan por su ausencia.

Hubiese venido a bien refrescar la cartera del MEF, cuyo titular tardó en sincerar las cifras de crecimiento de 2023 pese a las proyecciones de las calificadoras y que ante el encarecimiento de alimentos, lejos de ofrecer una solución, apela a recomendar platos de comida a preparar, versión viviente del libro ¿Qué cocinaré hoy?; también está Cultura con la razia que se viene dando en IRTP y Radio Nacional. ¡Ah!, ¿Y qué me dicen del sempiterno Raúl Pérez-Reyes que va y viene de Energía y Minas, MTC y Produce en varios gobiernos? Con todo, les deseo ¡Éxitos!