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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Alberto Fujimori salvó a país del terrorismo y de la bancarrota. Esta afirmación es falsa. Está probado que ni Fujimori ni su socio, Vladimiro Montesinos, conocían el operativo que el GEIN realizaba hacía dos años para capturar a la cúpula de Sendero. ¿Queda alguien capaz de creer que, con el perfil altísimo que se esforzaba en mantener, Fujimori no habría estado sentado con Abimael Guzmán en el momento de su captura, tal y como se paseó –para las cámaras– entre los cuerpos sin vida y sin envolver de los terroristas, luego de la toma de la residencia del embajador de Japón? El GEIN fue reduciéndose hasta que, en 1995, cuando ya solo contaba con cuatro agentes, lo desactivaron ante la sorpresa boba de muchos de nosotros que seguíamos aplaudiendo al dictador por algo con lo que no tuvo nada que ver.

El plan económico que sacó al país de la "inviabilidad" –como gustan decir algunos– fue el que había diseñado el equipo de Vargas Llosa, el mismo que incluía el "shock" que Fujimori usó para asustarnos y votar por él. Por supuesto, luego de jurar 50 mil veces que no lo haría, lo hizo. Pero el plan funcionó y, de hecho, según varios de los protagonistas e involucrados en su diseño e implementación (entre los que se encontraban Ricardo Lago, el desaparecido Fritz Dubois y varios otros), estaba en marcha mucho antes de que a Fujimori y Montesinos se les ocurriera como excusa para cerrar el Congreso. Por lo tanto, no era necesario cerrar nada para sacar al país de la debacle (en la que estaba, pues fue así como lo dejó Alan García, no olvidar).

El tamaño del robo fue igual al 50% del gasto público o al 4.5% del PBI. El "roba pero hace obra" no lo inventaron solo para Castañeda, pero nos queda hasta ahora.