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Luis Davelouis: A quién le importa

“Un individuo es filmado en una discoteca mientras viola a una mujer que se encuentra inconsciente, seguramente bajo los efectos del alcohol. Las personas alrededor (…) solo atinan a filmar”.

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Fecha Actualización
Hace algunos años, en el centro financiero de San Isidro, ayudé a un hombre de unos 65 años al que acababan de robarle casi en la puerta de una entidad financiera, frente a dos policías paraditos a 20 metros y delante de cientos de transeúntes. Entre dos hombres lo sujetaron, lo golpearon y le robaron su maletín con el dinero que llevaba para pagar su hipoteca.

La inseguridad en nuestra ciudad ya era grande y no me sorprendió la temeridad de los ladrones; me dejó helado que nadie moviera un dedo para ayudarlo. Ni a defenderse ni a levantarse. Cuando esto ocurrió, solo algunos teléfonos tenían cámara, así que no había muchas maneras de mostrar empatía si no era ayudando de verdad.

Entre ayer y antes de ayer se hicieron virales dos videos en las redes sociales. En uno, la seguridad de United Airlines saca a la fuerza –y arbitrariamente– a un pasajero que escogieron de manera aleatoria para que en su lugar vaya otro. Como suele suceder, la empresa había sobrevendido el vuelo y, mientras los matones de UA asaltaban al elegido –quien quedó sangrando–, los demás pasajeros hicieron las tomas que vimos después y que –ojalá– le costarán una millonada a la aerolínea. La empatía solo les alcanzó para filmar. "Mejor a él que a mí".

El otro video es asqueroso. Un individuo es filmado en una discoteca mientras viola a una mujer que se encuentra inconsciente, seguramente bajo los efectos del alcohol. Las personas alrededor, incluyendo a la seguridad del establecimiento, solo atinan a filmar o a pedirle que mejor se la lleve a otro lado. Sí, a seguir violándola.Lo verdaderamente aterrador es que, para demasiada gente, el hombre mayor no debía cargar tanto efectivo; el médico no debió resistirse y la mujer no debió tomar tanto.