El precandidato nacionalista, Milton von Hesse, ha sostenido que asumirá "los pasivos y los activos del actual gobierno". Esto suena muy bien como discurso y permitiría al bien pensado asumir que el ex funcionario nacionalista estará en capacidad de hacer un balance honesto y objetivo de lo bueno, lo malo y lo feo de estos cuatro años.
Pasadas varias entrevistas en este pequeño road-show mediático, el balance no es lo que uno espera: se exageran los aspectos positivos, se minimizan los negativos y se evapora cualquier explicación sobre los groseros errores del actual gobierno. Ni una palabra sobre los seguimientos de la DINI a periodistas, políticos y empresarios, ni una pizca de incomodidad ante los megaproyectos, ni ante las corruptelas de los allegados a Palacio, ni una autocrítica ante la desaceleración y la incompetencia gubernamental, ni una mueca ante la grosera manipulación en los ascensos en el Ejército, y así.
Este desbalance en el discurso político no es propiedad del oficialismo, por cierto. Lo mismo hemos observado en las tiendas del fujimorismo, de los ppkausas, el aprismo, el toledismo, los Acuña-boys, etc.
La primera reacción es asumir que así son las campañas electorales: vender lo electoralmente bonito y esconder lo feo para cuando se gobierna. Si nos remitimos a nuestra historia reciente, el caso del presidente Humala es muy elocuente (pasar de la Gran Transformación a lo que sea que haya sido este gobierno), pero no es el único: el ex presidente García ofreció revisar el TLC con Estados Unidos, así como Toledo ofreció una refundación institucional, en tanto que Fujimori ofreció en 1990 la reactivación sin shock, y así.
Quien ha dado, al menos en el discurso, un cambio insospechado ha sido justamente Keiko Fujimori, de quien menos se esperaba. Uno puede creerle o no, pero ahí vemos un ejercicio de revisión interesante. Si electoralmente le funciona o no, estará por verse.
Nota aparte. Mi absoluta solidaridad con César Hildebrandt ante la campaña palaciega denunciada; no dudamos de que esas prácticas están vigentes y esperamos que en su momento sean investigadas y castigadas.