Juan José Garrido: Acertadas designaciones

Muy buenas designaciones ministeriales las de Bruno Giuffra para el MTC y Pedro Olaechea para Produce. El primero se ganó sus credenciales a través de una muy buena gestión en Produce. Sin miedos, Giuffra tomó al toro por las astas: primero, acercó el ente a los principales interesados (el sector empresarial), pero no desde un filo mercantilista sino de "destrabe"; léase, quitándole de encima las absurdas regulaciones que se han ido sumando a través de los años y que habían puesto al sector industrial en rojo (3 años consecutivos) luego de décadas de estar en azul. Segundo, no menos importante, puso pausa a esa absurda apuesta por el determinismo sectorial, implementada a través de los CITES (cuyas auditorías, dicho sea de paso, dejan al títere sin cabeza).

En estos 10 meses de gobierno, Giuffra demostró ser un "doer" (un "hacedor", una persona que actúa, toma la iniciativa y no patea los problemas o los pone en "estudios" para que vegeten indeterminadamente). Y si algo necesita el sector de Transportes y Comunicaciones es eso: una persona que esté determinada a poner al día nuestra infraestructura (cuyo índice se sitúa en el puesto 89 sobre 138 en el reporte del Foro Económico Mundial). El Perú necesita con urgencia mejorar sus carreteras (la panamericana, sobre todo, por donde fluye cerca del 80% del transporte nacional), puertos y aeropuertos, trenes y demás. Por otro lado, los servicios de comunicación (sobre todo celular) se encuentran atorados por la falta de antenas e infraestructura. Todo ello resta competitividad, razón por la cual es necesario empezar un agresivo plan de inversiones y búsqueda de soluciones prácticas y concretas.

El congresista Olaechea, por otro lado, es un empresario, y ahora también político, que ha demostrado mucha madurez y apertura, y por ello es reconocido por sus pares como un activo importante del Gobierno. Ha sido presidente de la SNI, con lo cual sabrá entender la problemática de dicho sector. El costo de su pase a Produce será en el Congreso: Olaechea era de los pocos que podía tender puentes con la oposición.