Esta vez, las Valquirias del Equipo Policial de la PNP en apoyo a los fiscales anticorrupción han logrado su propósito defensor.
Esta vez, las Valquirias del Equipo Policial de la PNP en apoyo a los fiscales anticorrupción han logrado su propósito defensor.

Las Valquirias son diosas que aparecen en el Cantar de los Nibelungos, antiguo mito teutón. Ellas son las defensoras del Valhalla, el olimpo germánico, a la vez que están encargadas de recoger las almas de los guerreros caídos en combate.

Precisamente, apelando a la figura de defender el orden germánico, durante la Segunda Guerra Mundial las fuerzas armadas alemanas elaboraron la Operación Valquiria. Se trataba de un plan de emergencia para ejecutarse en caso del colapso del Tercer Reich.

Soldados alemanes contrarios a la barbarie de Hitler la quisieron poner en marcha luego del complot del 20 de julio de 1944, cuando detonaron una bomba al lado del dictador. El problema es que Hitler sobrevivió al atentado. La Operación Valquiria quedó trunca y los conspiradores fueron detenidos y fusilados.

Lejos, muy lejos, estamos del olimpo germánico. Estamos más bien atollados en un limbo criollo de prebendas y corrupción. Aunque, esta vez, las Valquirias del Equipo Policial de la PNP en apoyo a los fiscales anticorrupción han logrado su propósito defensor.