La forma en la que el ministro Morán anunció la creación de un equipo especial contra delincuentes extranjeros, especialmente los de nacionalidad venezolana, es el ejemplo más reciente de populismo ministerial, con el agravante de que viene manchado con tintes de xenofobia. Más allá de buscar el aplauso fácil de la platea, ¿qué sentido estratégico ha seguido el ministro Morán para anunciar así la creación de este equipo especial? Los venezolanos son responsables del 1.8% de los delitos cometidos en el país. El 98.2% de los robos, asesinatos y demás delitos son cometidos principalmente por peruanos. ¿También tiene pensado crear un escuadrón especial para todos esos casos?

El mensaje de Morán deja una estela tóxica: fortalece la idea de que donde hay un venezolano, hay un potencial criminal. Aunque esa relación esté muy lejos de la evidencia. De todos los venezolanos que han llegado al Perú, únicamente el 1.2% ha participado en actos delincuenciales. Conociendo estos datos, ¿cuál es la real necesidad del exhibicionismo populista y xenófobo que ha mostrado el ministro? De hecho, primera vez que escucho que el delito se perseguirá por nacionalidad y no especialidad. No pongo en duda la necesidad de perseguir la delincuencia, pero es difícil de creer que esta estrategia tenga realmente ese objetivo y no buscar un poco de rating. ¿No sería mejor asegurar que las comisarías funcionen o profundizar el programa de recompensas? Esos sí que serían grandes anuncios.

Es fácil caer en populismos como estos. Siempre habrá quién lo celebre, sobre todo cuando la inseguridad nos ha tocado la puerta a todos. Pero anuncios como el del ministro Morán siembran una nueva tensión innecesaria y fortalecen la hostilidad con una población que en su amplia mayoría ha llegado al Perú en buena lid.