El poder del dinero y la política

Es mayor en países como el nuestro. Acá, pareciera hacerse todo lo posible para que estas cosas permanezcan inalterables. Cada vez más se impone la regla que sin dinero no solo es muy difícil ganar las elecciones, sino también inscribir un partido o lanzar una candidatura. Ahora, Odebrecht y Lava Jato inundan nuestras primeras planas, tiñendo con la corrupción las coyunturas y el debate político. Pero, desde siempre, el poder del dinero y la política anduvieron juntos.

En una valiente entrevista (EC 5/4/2009), Dionisio Romero, después de apartarse de la presidencia del Banco de Crédito (BCP), supo declarar:
-¿Los grandes empresarios financian campañas? Es verdad.

-¿Ustedes han financiado? En la primera que financiamos (1980), le dimos la misma suma a los tres principales candidatos: Belaunde, Bedoya, (Villanueva).

-¿Muchos presidentes los llaman? Sí nos llaman. Y te mentiría si te digo que no los vamos a buscar nunca. Ante un problema serio, tocamos las puertas.
-¿Hay una relación constante con el poder? Trato de que no me llamen porque cuando lo hacen, nunca es para regalarte nada.

-¿Quién es el que más lo ha llamado? El que menos me ha llamado fue Fujimori (tres veces), y el que más, García en su primer gobierno.

-¿Financió todas las campañas? Todas no. Algunas me han salido gratis.

-¿Se arrepiente de haber ido a las oficinas de Montesinos? No. Yo fui por un tema específico, me arrepiento por todos los problemas que me trajo, pero aquí, un cliente (pesquera Hayduc, endeudada al BCP) necesitaba ayuda y la estaban fregando y cerrando sus fábrica (…). Después, cuando me llamó para lo de Hayduc, yo le dije, ya te di lo que me pediste, ¿para qué quieres que vaya?

-¿Montesinos salió del país en un avión del grupo Romero? Sí, es cierto. Me llamaron de Palacio (de Gobierno) David Saettone, que era ex funcionario del BCP, y me lo pidió. Maldita la hora que dije que sí.