Despertando el turismo de fronteras

Nuestro principal acceso para el turismo receptivo es el Jorge Chávez, pero no es el único. Existen otras importantes “puertas” en nuestras fronteras: Tumbes, Piura, Puerto Maldonado, Puno, Tacna. Desde allí recibimos un fuerte volumen de viajeros que llegan por carretera, provenientes de países vecinos. Es el llamado “turismo de fronteras”, un segmento clave para generar crecimiento.

Este turismo no requiere pasajes ni una gran planificación, solo disponer de un feriado y subir al carro. Por ello, el éxito radica en darle mucha fluidez. En ese sentido, los nuevos edificios donde compartimos aduanas con los países limítrofes, permitiendo cruzar en solo 15 minutos, merecen nuestro mayor aplauso. Sin embargo, tenemos la oportunidad de planificar en función del calendario de los países vecinos. Durante sus feriados, la alta demanda hace que ingresar tome dos horas. Podemos aprovechar mejor estos picos, si Migraciones coloca más personal atendiendo en esas fechas.

Una segunda área de acción es la mejora de carreteras. Con vías de doble calzada, nuestros vecinos del sur podrían ir fácilmente vía Tacna hasta Arequipa y Cusco. O de La Paz a Puno. Y nuestros amigos ecuatorianos podrían recorrer las bellas playas de Tumbes, todo el camino hasta Piura. Eso está en cancha del MTC.

En tercer lugar, debemos promocionar nuestras ciudades limítrofes. Chile publicita muy bien sus atractivos en Arequipa, Moquegua y Tacna. PromPerú tendría que hacer lo mismo, además de Guayaquil, Loja y Cuenca, para fomentar viajes a destinos peruanos próximos.

El turismo de fronteras representa 30% del total receptivo, pero si despertamos su potencial, haría crecer rápidamente la torta, en beneficio del país. ¡Manos a la obra!