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El simulacro de Ipsos confirma lo que Datum había adelantado: casi la mitad de los peruanos no ha decidido su voto. El 43% a nivel nacional sería blanco o nulo. En Lima ese porcentaje está en 50.1%. Brutalmente alto. Como referencia, en las municipales del 2018, en Lima, una semana antes los votos blancos o viciados no superaban el 15%.
El voto inválido podría arrasar con la jornada electoral, generando una verdadera distorsión de los resultados finales e inflando artificialmente el porcentaje de votos obtenido por todos los partidos. El 8% de AP se convertiría en casi 15%, mientras que el 6% de Fuerza Popular y los morados subiría a 11%. Esto también beneficiaría a quienes están debajo de la valla, como el Apra, que ni llega al 3%, pero podría terminar con una bancadita en el Congreso.
Lo más probable es que en los siguientes días parte del porcentaje de votos inválidos migre hacia los partidos con más intención de voto, principalmente donde los morados y APP. Ellos han venido subiendo, mientras que AP baja ligeramente y el fujimorismo se sostiene con su voto incondicional. Como sea, es casi seguro que estos cuatro partidos estén en el Congreso, pero sin gran respaldo de la población. Somos Perú también llegaría.
Más abajo están el APRA, el FA, FREPAP, Podemos y JP. A pesar de todo, siguen en carrera, con posibilidades de convencer a electores indecisos que los ayuden a pasar la valla, así que esta semana los veremos sacar chispas.
Lo que sí me atrevería a confirmar es que la campaña mitómana y violentista de Solidaridad Nacional ha sido rechazada de plano por la población. Lo mismo le está ocurriendo a Contigo. ¡La intención de votos de ambos partidos, suma, en conjunto, menos que la intención de voto del Frepap! Este sí que sería un K.O. democrático.
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