Intento coherente e integral

Hubiera sido un grave error dejar en suspenso la aprobación de esta norma, ya que esto se habría prestado a tomas y dacas políticos; y el texto final de la ley hubiera resultado un frankestein. Este es el primer intento coherente e integral que se hace en la historia republicana del Perú para reformar el sector público. Hubo un intento cuando el segundo gobierno aprista creo el régimen del Contrato Administrativo de Servicios (CAS), pero al final no hubo avance. Las demás iniciativas que buscaban lo mismo fueron buenas intenciones que no mejoraron nada. Por eso, tenía que aprobarse, pues el país necesita ya un sector público, cuya contratatación de sus trabajadores esté basada en la meritocracia y el esfuerzo individual. Ahora, la puesta en marcha de esta norma hará competitivo el aparato estatal, en todos sus niveles, y mejorará la eficiencia de todos los procedimientos. Si hubo concesiones, fueron para permitir que la ley se dé, pero sin desplazar la meritocracia.