(Foto GEC Archivo)
(Foto GEC Archivo)

El sector educativo en el Perú siempre ha dejado mucho que desear. En los últimos años, parece que, en lugar de cerrar brechas, las estamos abriendo aún más.

Un análisis de ComexPerú reveló que el 55.9% de los colegios en el país se encuentra en riesgo de colapsar, afectando directamente a millones de estudiantes que dependen de estas instituciones para su formación y desarrollo. Los departamentos con la situación más crítica son Cajamarca, Cusco y Puno, donde 7 de cada 10 escuelas están al borde del colapso. Todo ello demuestra que la descentralización ha sido un rotundo fracaso.

En el Perú, la brecha de infraestructura educativa es abismal. Hasta diciembre de 2023, esta brecha ascendía a S/174,603 millones, según el Ministerio de Educación. Esta cifra refleja la inversión necesaria para cubrir las deficiencias en construcción, mantenimiento y equipamiento de locales educativos, así como el acceso a servicios básicos como agua potable, electricidad y saneamiento. ¿Cómo pretendemos que los niños aprendan en los colegios con esos abismos de infraestructura?

Del total de la brecha, un 60.3% corresponde al área rural, mientras que un 39.7% se encuentra en zonas urbanas. Los departamentos que requieren mayor inversión son Lima Metropolitana, Cajamarca y Loreto. La situación es aún más grave si consideramos que, de las 55,358 instituciones educativas existentes en el país, la mayoría necesita una reconstrucción completa. Esta realidad es intolerable y refleja una negligencia sistémica que perjudica a nuestros niños y jóvenes.

No es un problema de presupuesto, sino de gestión. Al cierre de junio, solo se ha ejecutado el 37.3% del presupuesto destinado al mejoramiento de la infraestructura y el equipamiento de escuelas. Callao y Tumbes muestran los peores avances, con un alarmante 0% y 11.4% de ejecución, respectivamente. Nuevamente el fracaso de la descentralización.

Hace pocos días, ComexPerú se unió al “Pacto por la Educación de Calidad” de IPAE. Este es un compromiso conjunto de 26 instituciones gremiales y organizaciones relacionadas con la educación. Este esfuerzo refleja la importancia de la colaboración entre el sector privado y el gobierno para mejorar la educación en el país.

Sin embargo, no basta con compromisos y firmas. Es crucial que las autoridades nacionales, regionales y locales trabajen de manera coordinada y eficiente para asegurar la adecuada ejecución de los presupuestos asignados.

La educación es la base sobre la cual se construye el crecimiento a largo plazo de una nación. Debemos garantizar que nuestros niños y jóvenes cuenten con las herramientas y el entorno necesarios para desarrollarse plenamente. Solo así podremos aspirar a un Perú más competitivo en el escenario global.

TAGS RELACIONADOS