(Foto: Presidencia)
(Foto: Presidencia)

-¡Este consejo del asesor argentino Maxi a Vizcarra de achorarse al Congreso le resultó un bumerán! La respuesta congresal fue buenísima como contestación política al eterno matón populista que busca “punching bags” para las encuestas, pero pésima en lo legal: eliminar esas inmunidades compromete la marcha del Estado y ahora te pueden cambiar la Constitución en un toque.

-Vizcarra está complicado: la salida de Mirian Morales es inevitable y esa denuncia sobre su cuñado finaliza con el mito de que es la Madre Teresa. Esto del cuñadito se suma al hospital, la irrigación, Swing, Chinchero, la recepción de dinero de PPK siendo jefe de campaña, etc. Si le quitan la inmunidad en la segunda legislatura, Vizcarra podría ser procesado ya por todos estos casos.

-”Un pueblo que elige políticos corruptos, impostores y ladrones no es su víctima sino su cómplice”. Esta durísima frase de George Orwell resume todo este debate acerca de la inmunidad. El problema no son los “inmunes”; el problema aquí son los que eligen a estos “inmunes” a sabiendas de que son unos pillos, esos a los que el caricaturista velasquista Heduardo bautizó como “el electarado”. Podrán poner mil filtros (no reelección, condenas, primarias, asustarles con que ya no habrá inmunidad) o Tuesta y su gente podrán jugar a “ingenieros electorales” para direccionar la oferta electoral, pero todo eso será inútil mientras tengamos un elector al que las cuestiones morales e intelectuales no les importan, que solo vota porque le obligan y que decide su voto en la misma cola (23%) o muy pocos días antes (17%). Con filtros y todo, estos seguirán eligiendo pillos, medievales como los Frepaps o primitivas desinformadas insolentes, como esa congresista García.

PD: Muchos coleguitas ayudaron a parir y celebraron el golpe de Vizcarra contra el anterior Legislativo. ¡Celebren pues ahora a este Congreso!