Tras una extensa investigación, la Policía de Miami-Dade y la Fiscalía Estatal acusó esta semana al empresario Manuel Marín, fundador de la cadena Presidente Supermarkets, por los delitos de homicidio, secuestro y confabulación en contra del amante de su esposa.
Las autoridades de la ciudad estadounidenses también implicaron como sus cómplices a Alexis Vila Perdomo, experto en artes marciales, Ariel Gandulla, ex luchador de MMA, y el entrenador y promotor Roberto Isaac.
Camilo Salazar tenía 43 años cuando su cadáver fue encontrado en el noreste de Miami-Dade tras haber sido brutalmente golpeado, degollado y quemado en 2011.
Hasta el momento se desconoce el paradero de Manuel Marín, pero se cree que, tras cometer el crimen, huyó a Europa, específicamente a España.
En tanto, Isaac y Villa se han declarado inocentes mientras que Gandulla se ha dado a la fuga huyendo fuera del país.
Se desconoce si Marín tiene un abogado en el sur de la Florida que lo represente. En torno a quién maneja la cadena Presidente Supermarkets, registros estatales sugieren que sus hijos dirigen algunos de los supermercados en este momento.
La víctima tenía un romance con Jenny Marín, esposa de Manuel Marín, quien descubrió que su cónyuge le era infiel al verla junto al Salazar en un café en 2011. En aquel momento, los confrontó y a ella la obligó a subirse a su auto.
Pese al incidente, Salazar y Jenny Marín siguieron viéndose en secreto, según reportó esta semana la Polícia.
Registros telefónicos informan que, previo al asesinato de Salazar, tanto Marín, Gandulla, Isaac y Villa se comunicaron sucesivamente coordinando el homicidio. "Se cree que Marín huyó para no ser arrestado y enjuiciado por el secuestro y asesinato de la víctima", escribió Christopher Villano, detective de la Policía de Miami-Dade.
PRESIDENTE SUPERMARKETS
La cadena ha crecido en los últimos años con más de 30 locales en los condados de Miami-Dade, Broward y Palm Beach. En 2014, alcanzó junto a la cadena Extra ventas combinadas de US$700 millones.
"Nuestra meta es llegar a los $1,000 millones", le dijo el portavoz al Nuevo Herald en el 2015.