Madrid ha experimentado una inusual y histórica nevada que ha cubierto toda la ciudad en medio de la sorpresa de millones de españoles, debido a la tormenta ‘Filomena’.
Esta situación ha generado cientos de imágenes insólitas de gente jugando en la nieve, un sujeto andando en un trineo jalado por perros y una ciudad cubierta por una capa blanca de nieve.
Sin embargo, lo que muchos no esperaban respecto a este inusual fenómeno meteorológico, es que las teorías conspirativas también empezarían a surgir en un intento de explicarlo.
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Tal es el caso de una usuaria de Twitter que cree que la nevada es parte de algún extraño plan y que la nieve no es otra cosa que plástico, lanzado sobre la ciudad.
Pero lo que ha llamado más la atención es que para probar su punto, la mujer hizo un video en el que toma una bola de nieve de su balcón e intenta quemarla con un encendedor a fin de demostrar que esta estaba formada de plástico.
La mujer asegura que su bola de nieve es plástica debido a que el calor no la derrite y que para colmo se torna negra al contacto con el fuego, además de un olor a “plástico quemado”.
“Debería caer agua y deshacerse, porque es obvio que con el fuego tiene que hacerlo [...] Esta es la m***da que nos mandan, puro plástico. Nos siguen engañando con todo”, concluye la protagonista del video.
Este video empezó a viralizarse en Twitter y generó todo tipo de reacciones de burla entre usuarios que aseguraban con sarcasmo que se trataba de nieve plástica enviada por China o que dudaban si el fuego usado por la mujer era fuego de verdad e incluso surgió el nombre de Bill Gates nuevamente.
Por suerte algunos internautas, como el biólogo Alvaro Bayón, se molestaron en explicar a los escépticos la naturaleza del fenómeno visto en el video en un hilo bastante didáctico en donde se menciona los estados de la materia, los efectos del calor y los componentes de un encendedor. Características que explican perfectamente todo lo mostrado en el video.
Resulta que el agua, incluso congelada, tiene un alto calor específico. Si la bola de nieve esta apelmazada, se elimina el aire entre los copos, entonces el hielo está en contacto con más hielo. Cuando la llama se aplica sobre un punto localizado, la mayor parte del calor que recibe se disipa por el resto de la masa de hielo sin llegar a derretirse como se espera.
Y en el punto en el que la llama calienta la bola de nieve sucede un proceso conocido como sublimación, que es cuando el agua a una muy baja temperatura se convierte en gas automáticamente al exponerse a alta temperatura de manera repentina.
Respecto al hollín visto en la bola de nieve y el olor a “plástico quemado”, resulta que este se debe a las impurezas del combustible quemado por el encendedor, que se deposita en la superficie de la bola de nieve. Un fenómeno bastante común cuando se quema cualquier combustible.