Sangrienta Navidad. Un menor de 12 años acabó con la vida de su hermano de 4 en la localidad de Benito Juárez, en México, y causó conmoción por la brutalidad con la que realizó el crimen.
Todo ocurrió el 19 de diciembre. El asesino se levantó por la noche y se acercó a la cama de su hermano y lo asfixió con una almohada. Luego, bajó a la cocina y agarró un cuchillo, regresó a la habitación y realizó un corte de 15 cm en el cuello del menor, según informaron medios mexicanos.
Por si fuera poco, el adolescente de 12 años apuñaló en ocho ocasiones a su hermano. Tras culminar el sangriento crimen, regresó a su cama a continuar con su siesta.
Fue la cuidadora del hogar la que descubrió la macabra escena y dio alerta a las autoridades. Estas se comunicaron con los padres de la víctima, que se encontraban de viaje aquella madrugada.
El menor de 12 años, quien es adoptado, dio cuenta a las autoridades y explicó que tenía celos de su hermano menor porque este había recibido un carro de juguete como regalo adelantado de las fiestas, por lo que creía que su madre lo quería más que a él.
"Me dieron celos", consignó ante los trabajadores sociales y personal de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México. El menor asistía a terapias para contener su agresividad y odio. A ello se le sumaba la separación de sus padres.
De acuerdo con el Sistema de Justicia Penal, no se lo puede acusar de ningún delito por su edad, razón por la que quedó en manos del juez de Control, que deberá decidir será trasladado a un albergue temporal o lo devolverá a sus padres.