En 2021, un adolescente de 17 años que se encontraba bajo los efectos de las drogas, atropelló salvajemente a una mujer que paseaba a su hijo de ocho meses en su cochecito en Los Ángeles (California), y luego intentó darse a la fuga sin éxito gracias a la acción de otro auto. El joven fue detenido y sentenciado a unos meses en un reformatorio, sin embargo, dos años después es asesinado a tiros en extrañas circunstancias.
El sujeto identificado como Kristopher Baca fue encontrado muerto en Palmdale, California, según el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles. Las investigaciones determinaron que se trataba del mismo adolescente que atropelló a una mujer y su bebé para luego intentar darse a la fuga, según informa FOX News.
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La oficina del médico forense del condado de Los Ángeles dio a conocer la muerte de Baca, pero sostuvo que el examen todavía estaba pendiente. Actualmente, se desconoce si su muerte está relacionada con el caso de atropello y fuga, y no se dispone de una descripción del sospechoso.
La madre víctima del atropello años atrás, que pidió ser identificada como Rachel, reveló que su esposo estaba fuera de la ciudad cuando escuchó la noticia. Ella dijo que estaba aliviada y entristecida por el asesinato de Baca.
“El universo brindó la justicia que no nos dieron en la corte, pero un castigo mucho más severo que el que le dieron a él en un tribunal de justicia”.
El caso llegó a los titulares nacionales el año pasado, cuando la oficina del fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, George Gascón, solicitó una sentencia de cinco a siete meses en una centro de libertad condicional juvenil, un castigo para los jóvenes delincuentes descrito como menos severo que la escuela militar.
El adolescente ya estaba en libertad condicional por un delito grave por envenenar la bebida de una niña de secundaria cuando sucedió el atropello y fuga, el 6 de agosto de 2021.
El video mostraba un vehículo robado a toda velocidad en dirección contraria por una calle secundaria de un solo sentido. Se estrelló contra una mujer que paseaba a su hijo pequeño en un cochecito. Luego pisó el acelerador para alejarse de la escena, pero un buen samaritano en una camioneta lo embistió de frente y evitó que escapara.