El expresidente de Italia Oscar Luigi Scalfaro, quien estuvo en el cargo siete años (1992-1999), unos de los más difíciles de la historia del país, murió hoy en Roma a los 93 años, según confirmaron medios de ese país.
Durante su etapa al frente de la jefatura del Estado vivió la ofensiva de Cosa Nostra, la mafia siciliana, con los atentados a los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino (1992).
Además, de los años más intensos de Tangentopoli, la extensa red de corrupción que implicó a todos los grupos políticos del momento, sobre todo el Partido Socialista.
El funeral del exmandatario se realizará mañana, lunes, de forma privada en la basílica de Santa María in Trastevere, en Roma. La prensa no informó los motivos de su deceso.
Scalfaro, quien ocupaba como todos los expresidentes también un escaño como senador vitalicio, nació en Novara, en la región norteña de Piamonte, el 9 de septiembre de 1918.
El articulista del Corriere della Sera Paolo Franchi destacó como Scalfaro fue un exponente de la parte más conservadora de la Democracia Cristiana (DC), pero su defensa acérrima del Parlamento y de la Constitución lo convirtió en un rival del primer gobierno de Silvio Berlusconi (1994) y posteriormente en un fiel aliado de los Ejecutivos de centroizquierda como el de Massimo D'Alema o Romano Prodi.