Desde que Donald Trump asumió el cargo de presidente de Estados Unidos, las detenciones de "personas no admisibles", es decir inmigrantes clandestinos, en la frontera entre EE.UU. y México se redujeron 40% en febrero respecto a enero, afirmó el Secretario de Seguridad Interior, John Kelly.
"La caída del número de detenciones muestra un cambio marcado", aseguró el secretario e indicó que esto se debe a la entrada en vigor de los decretos del Poder Ejecutivo pues declaró que estos se encuentran destinados a fortalecer las leyes migratorias, las detenciones y los movimientos de inmigrantes ilegales.
Kelly remarcó que normalmente las detenciones de inmigrantes ilegales aumentan entre 10% y 20%, pero este año se ha registrado una caída de 31,578 a 18,762 arrestos.
El funcionario del gobierno concluyó que los resultados muestran que "la aplicación de las leyes tiene un impacto, que la disuasión tiene un impacto, y que una aplicación efectiva de las normas en materia de inmigración tiene un impacto".