Dilma Rousseff: ¿Cuáles son las razones por las que se busca destituir a la presidenta de Brasil?

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, afronta uno de los principales retos a menos de un año de llegar al poder, pues existen diversas iniciativas que podrían sacarla del cargo a través de un juicio político aprobado por el Congreso.

La posible destitución de Rousseff se fundamentaría en pronunciamientos emitidos por las instituciones y en las constantes denuncias de los partidos contrarios.

IRREGULARIDADES EN LA CAMPAÑA DE REELECCIÓN El Tribunal Superior Electoral (máxima autoridad electoral de Brasil) admitió iniciar una investigación para verificar la presunta existencia de irregularidades en la campaña política que llevó a Dilma Rousseff ser nuevamente elegida como presidenta en el 2014.

Las investigaciones iniciadas a Dilma Rousseff y el vicepresidente Michael Terner buscan determinar si cometieron abuso de poder durante sus campañas y si usaron dinero ilegal para financiarla, lo que incluiría donaciones obtenidas a través del caso Petrobras.

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En estas acusaciones, presentadas por el Partido de la Social Democracia Brasileña, se señalan que en la campaña de reelección de Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores, y del vicepresidente Michael Temer, del Partido del Movimiento Democrático de Brasil, el gobierno colaboró a favor de los candidatos al permitirles utilizar edificios públicos y los espacios de televisión del Estado.

Asimismo, la mandataria fue acusada de manipular indicadores socioeconómicos y los datos de pobreza en el país, gastar más de lo que informó a la Justicia Electoral y haber financiado parte de su campaña con dinero sucio proveniente del caso de corrupción de Petrobras.

IRREGULARIDADES EN SUS CUENTASPor su parte, el Tribunal de Cuentas de la Unión emitió un fallo que decide rechazar la contabilidad pública del 2014 que presentó el gobierno al considerar que se cometieron una serie de irregularidades para cubrir un amplio déficit fiscal en ese año.

Según el juez instructor del caso, Augusto Nardes, se omitieron del balance presentado deudas por una suma equivalente a US$27,300 millones, lo cual llevó a que el gobierno justifique políticas expansivas insostenibles cuando en su lugar debió esforzarse en contener el gasto público.

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Otras de las irregularidades detectadas por el Tribunal son: la apertura de créditos sin autorización del Congreso, la omisión de la contabilidad de cuentas ya contraídas y cuestionables maniobras contables realizadas con el objetivo de reducir el cálculo del déficit fiscal.

Otras de las maniobras fiscales consistieron en retrasar el pago de fondos destinados a los programas sociales gubernamentales a los bancos públicos que los gestionan, lo que permitió al Ejecutivo reducir unos US$1,795 millones al déficit fiscal. Ello conllevó a que los bancos costeen los programas sociales con sus propios fondos.

ACUSACIONES DE LA OPOSICIÓNEn tanto, en el Congreso de Brasil, los partidos de oposición han presentado múltiples peticiones para el inicio de un juicio político contra Dilma Rousseff con el fin de destituirla del cargo de presidenta.

Según informó el diario El Mundo, Eduardo Cunha, presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, habría recibido al menos 14 solicitudes para iniciar el juicio político, de los cuales 11 han sido rechazados debido a que no cumplían con las exigencias técnicas necesarias para que pueda abrirse un proceso político contra la mandataria.

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Las peticiones pendientes, según se informó, han sido presentadas por un grupo de conocidos juristas, incluyendo una que ha sido planteada por Helio Bicudo, uno de los fundadores del Partido de los Trabajadores. La oposición confía en que el presidente de la Cámara acepte esta solicitud en particular dado a que cuenta con "vasta argumentación jurídica" y se refiere a las maniobras contables ilegales detectadas por el Tribunal de Cuentas de la Unión.

Esta última solicitud, que incluirá también un anexo con supuestas irregularidades fiscales ocurridas en el 2015, será analizada por la presidencia de la Cámara la próxima semana.

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Por Carlos Viguria(carlos.viguria@peru21.com)