Plan iba a beneficiar a 5 de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que residen en EEUU. (AP)
Plan iba a beneficiar a 5 de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que residen en EEUU. (AP)

Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Un juez federal de bloqueó temporalmente el lunes el plan del presidente para proteger a millones de inmigrantes indocumentados, un asunto que probablemente será abordado en la campaña presidencial de 2016.

El juez de distrito Andrew Hanen, de Brownsville, Texas, dictaminó a favor del pedido formulado por 26 gobernadores que se oponen al plan y afirmó que el Gobierno no ha cumplido con los procedimientos. La Casa Blanca anunció que el Departamento de Justicia apelará la decisión.

Los estados y jueces que patrocinaron la demanda ante el juez Hanen consideran que Obama se excedió en sus atribuciones presidenciales y que al ordenar acciones ejecutivas sobre la cuestión migratoria violó la Constitución. Los estados alegan que las acciones anunciadas por Obama provocarán "daños dramáticos e irreparables".

En un extenso documento de 123 páginas, Hanen aseguró que la decisión no considera que las acciones de Barack Obama sean ilegales, sino que cuestiona el derecho del mandatario de adoptarlas.

El juez Hanen destacó en su informe que las medidas anunciadas por Obama se refieren a una situación que es objeto de análisis por el Congreso. "No puedo apoyar un programa que no solamente ignora el dictado del Congreso, sino que activamente se propone frustrarlo", apuntó el magistrado.

Haciendo uso de su autoridad ejecutiva, Barack Obama anunció en noviembre de 2014 un programa para levantar la amenaza de deportación que pesa sobre 4,7 millones de inmigrantes ilegales.

¿EN QUÉ CONSISTÍA EL PLAN?Plan incluía una norma denominada "acción diferida" que posterga tres años la deportación de indocumentados y les permite obtener un permiso de trabajo temporal.

Aparte de la ampliación de la "acción diferida", los decretos de Obama incluyen un nuevo programa para legalizar temporalmente a los padres de ciudadanos estadounidenses o hijos con residencia permanente.

La inscripción para este último plan debía comenzar en mayo próximo y se calcula que ambos programas pueden beneficiar a unos 5 de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que residen en EEUU, de los que la mayoría son mexicanos, con un total de unos 6,5 millones, según el Centro de Investigación Pew.