“Voy a dinamitar el Banco Central” es una de las frases más repetidas de Milei. (Foto: MIDJOURNEY/PERU21
“Voy a dinamitar el Banco Central” es una de las frases más repetidas de Milei. (Foto: MIDJOURNEY/PERU21

Las elecciones generales ense desarrollarán el próximo 22 de octubre y el economis, líder y candidato del partido La Libertad Avanza, parte con ventaja.

Según la encuestadora Opinaia, el libertario obtendría 35% en primera vuelta, seguido de Massa con 25% y Bullrich con 23%. Y, en una eventual segunda vuelta, que se realizaría el 19 de noviembre, Milei se impondría a ambos contrincantes. Frente al peronista, Milei obtendría 49% y Massa 30%; y frente a la exministra macrista, el economista sacaría 39% y Bullrich 31%.

“Voy a dinamitar el Banco Central”, es una de las frases más repetidas de Milei. El economista ha cobrado relevancia en los últimos años por sus acalorados debates en los que utiliza groserías para referirse a políticos y opositores.

A pesar de su lenguaje florido, su visión económica ha cobrado fuerza en un país acostumbrado al asistencialismo y a un Estado asfixiante, motivo que lo llevó a ganar las elecciones abiertas simultáneas obligatorias (PASO) hace tres semanas.

PRINCIPALES PROPUESTAS

Si bien la mayoría de propuestas de Milei se centran en el aspecto económico, su plan de gobierno también contempla reformas en el Poder Judicial. Por ejemplo, enfatiza que se debe despolitizar el sistema de justicia y anuncia que, de llegar al gobierno, nombrará ministro de Justicia a “un miembro respetado del Poder Judicial”. Asimismo, propone prohibir que sus integrantes tengan filiación política o participación política partidaria.

Milei asegura en su plan de gobierno que “el Estado argentino es la principal causa del empobrecimiento de los argentinos”. Tras ello, anuncia que la primera medida que tomará, de llegar a la Casa Rosada, es una reforma completa para volver al Estado previo a la llegada del kirchnerismo al poder. Así, propone eliminar 12 ministerios y solo dejar los portafolios de Economía, de Justicia, del Interior, de Seguridad, de Defensa, la Cancillería y el de Infraestructura. Adicionalmente, propone crear el ministerio de Capital Humano.

Milei asegura que no se despedirá “a ningún empleado de carrera del Estado”, sino que serán reasignados “a áreas donde sean necesarios”. No obstante, precisa que sí se despedirá a “todos los cargos políticos y nombramientos que se hayan realizado durante 2023″.

Todo ello va en la línea de su propuesta de reducir el gasto público “por 15% del PBI”, medida que, además, vendrá acompañada por la reducción de impuestos.

Otro punto que no le agrada al peronismo ni a la izquierda argentina es la propuesta de cerrar o privatizar todas las empresas públicas.

El plato fuerte del menú liberal de Meli es el cierre del Banco Central, al que culpa de generar la inflación asfixiante que tiene Argentina. El economista propone que en su país se reemplace el peso con el dólar, como se hizo en Ecuador.

PODRÍA FUNCIONAR

Iván Alonso, economista liberal, aseguró a Perú21 que la propuesta de eliminar el Banco Central no será fácil. “El Banco Central argentino es un apéndice del gobierno”, señaló. Sostuvo que países como el nuestro controlaron la inflación sin eliminar el BCR, al que se le otorgó autonomía. Alonso advirtió que si decide suprimir este organismo y apostar por la dolarización, podría funcionar. “A Ecuador le ha funcionado, ha tenido inflación baja durante mucho tiempo”, dijo.

De otro lado, resaltó la propuesta de privatizar las empresas públicas y aseguró que esta medida “le haría muy bien a Argentina, como se lo haría a cualquier país”. Sin embargo, anotó que es un proceso que toma tiempo y, por ende, no resolverá de inmediato la crisis económica.

Milei ha sido calificado como “ultraderechista” por diversos politólogos y periodistas. Sin embargo, Alonso considera que utilizar ese calificativo “es una manera de estigmatizarlo”. Señaló que “Milei es un liberal que cree en el mercado, en la libertad”. Pero no todo es positivo. “Me preocupa que él llegue a sentirse un iluminado”, comentó. En esa línea, explicó que “un iluminado no responde a principios y llega un momento en que puede creer que cualquier cosa que a él se le ocurre es incuestionable y que nadie la puede criticar ni dudar de él”, finalizó.