Un concurrido festival de música country en Las Vegas se convirtió en el escenario perfecto para que un desquiciado abriera fuego contra el público asistente. El saldo que deja, hasta el momento, es de 58 muertos y alrededor de 500 heridos.
Entre los sobrevivientes de este ataque, se encuentra una colombiana. Ella contó lo que vivió. Su nombre es Karen Ramos y, en conversación con Univisión, narró las horas de pánico y terror que tuvo que presenciar.
"Recién llegábamos al concierto. Cuando estábamos cerca a la puerta, una pareja de turistas me dice que le tome una foto y, cuando estoy por tomarla, escucho disparos. Pero no nos alarmamos porque se confundía con otros sonidos", relató.
De acuerdo con Ramos, a los pocos minutos, un amigo de ella viene corriendo a toda velocidad hacia ella y le instó en que corriera. "'¡CORRE, CORRE, ALGUIEN ESTÁ MATANDO A TODA LA GENTE!', me dijo mi amigo pero no sabía a dónde correr", prosiguió.
Karen Ramos detalló que, cuando la música se silenció, los disparos no cesaban y recién ahí pudo darse cuenta de la gravedad del asunto. "La gente estaba luchando por vivir, no sabíamos a dónde ir. La gente pasaba por encima de todo el mundo, todo era una caos", añadió.
Finalmente, la colombiana y sus tres amigos, pudieron salir con vida del recinto donde se realizaba el festival. "Gracias a Dios no tengo heridas de bala, solo tengo heridas menores, pero todo bien", aclaró.
Este tiroteo en Las Vegas se ha convertido en uno de los más mortíferos que ha sucedido en Estados Unidos. No se registraban tantas muertes en un solo ataque desde la masacre en la discoteca Pulse en Orlando. En aquel caso, 50 personas murieron acribilladas por un militante del Estado Islámico en junio de 2016.