El presidente de , , y su esposa, la primera dama Melania Trump, recibieron en la Casa Blanca al rey Abdalá II de y a la reina Rania, reunión donde no solo hubo halagos sino también elegancia. 

"Se han hecho muchos avances en Oriente Medio. Muchos. Y realmente todo empezó con el fin del horrible acuerdo con Irán. Ese acuerdo era un desastre, y las cosas son muy diferentes desde que acabamos con eso", dijo el presidente estadounidense.

Donald Trump no detalló cuáles son, a su juicio, esos avances en la región, y tampoco respondió a la pregunta de cuándo planea presentar su plan para lograr un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos.

Entusiasmado, Trump no dudó en alabar a su especial invitado por la labor en el tema de los refugiados y los campos. "Solo quiero decir que nuestras naciones tienen una muy buena relación", agregó.

Lo que también llamó la atención de la prensa internacional fue el elegante encuentro entre Melania Trump y Rania de Jordania, ambas vestidas de rosa, lo que ha sido ampliamente debatido en los medios especializados en moda.