La Paz (EFE). El 2019 cerró en Bolivia con 117 mujeres muertas víctimas de la violencia machista (feminicidio) y 66 casos de infanticidio, según datos difundidos este miércoles por la Fiscalía General del Estado.
La cifra de feminicidios es inferior a los 130 casos registrados en 2018, “sin embargo son vidas las que se han perdido y nos debe llamar a la reflexión a todos”, dijo el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, citado en un comunicado de su oficina.
"Son muchos los factores que están detrás de cada una de las muertes como el tema del machismo, la discriminación por solamente ser mujer, intolerancia y falta de respeto", reflexionó.
El último caso se registró el lunes 30 de diciembre en la ciudad andina de Potosí, donde una mujer falleció por la explosión de una dinamita detonada por su concubino, según la Fiscalía.
De los 117 casos de feminicidio registrados en 2019, 22 tienen sentencia condenatoria por procedimiento abreviado, 10 se extinguieron por muerte del agresor e igual número cuenta con acusación formal, 52 con imputación, 18 están en etapa preliminar, cuatro con rechazo y uno fue sobreseído, detalla el comunicado.
Lanchipa sostuvo que el Ministerio Público trabaja “en la persecución penal de feminicidios” para no permitir que estos delitos queden impunes.
Bolivia tiene en vigor desde 2013 una ley que protege a las mujeres de todo tipo de violencia y castiga el feminicidio con treinta años de prisión, la pena máxima de la legislación boliviana.
La demanda constante de las organizaciones defensoras de las mujeres es que la puesta en marcha de la norma todavía no ha sido plena, ya que aún son necesarios mayores presupuestos estatales y personal capacitado para combatir con más eficacia la violencia machista, entre otros aspectos.
Lanchipa también indicó que se ha tenido que "lamentar la muerte de 66 menores durante la gestión 2019", datos que calificó de "alarmantes porque se trata del sector más vulnerable".
"Son bebés, niñas y niños que no pudieron defenderse de su agresor o agresora que les quitó la vida de la forma más violenta", lamentó el fiscal en un segundo comunicado del Ministerio Público.
La Paz fue la región donde se registró la mayor cantidad de casos, con 21, seguida por Santa Cruz con 12, Cochabamba con 10, Chuquisaca con seis, Beni con cinco, Potosí con cuatro, Oruro y Tarija con tres cada uno y Pando con dos.
Según la Fiscalía, la cifra de casos fue menor a los 78 infanticidios registrados en 2018. Entre los últimos casos ocurridos en 2019 está el de un niño de 11 años que murió apuñalado a fines de diciembre tras defender a su hermana de 13 para evitar que fuera violada por un hombre.