La alcaldesa Susana Villarán aclaró que la Municipalidad de Lima no hace 'caja' con la recaudación obtenida por las multas de tránsito aplicadas a los conductores, sino con los impuestos municipales.
La autoridad edil se pronunció así ante las denuncias sobre supuestas irregularidades en la aplicación de las fotopapeletas, procedimiento que lleva a cabo la Policía Nacional y que fue suspendido ayer por el Ministerio del Interior.
Aseguró que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) solo se encarga de recibir el dinero de las multas y de proveer a la Policía Nacional de los instrumentos que le permitan realizar mejor su función, es decir los cinemómetros.
"No hay ninguna irregularidad de parte nuestra", dijo Villarán de la Puente a su salida de la iglesia Nuestra Señora de La Merced, adonde asistió para la celebración de la misa y Te Deum por el aniversario de las Fuerzas Armadas.
PRECISIÓNPor su parte, la gerenta de Transporte Urbano de la comuna limeña, María Jara, explicó que los inspectores contratados por la municipalidad tienen la función de aplicar las multas por infracciones a las reglas del transporte, mientras que la Policía Nacional se encarga de sancionar las faltas de tránsito.
La funcionaria refirió a la Agencia Andina que las infracciones de transporte están relacionadas con la prestación del servicio público que brindan buses, taxis y combis.
"Los inspectores supervisan que estas unidades respeten los paraderos, que circulen con autorización y que cubran sus rutas, entre otros aspectos", especificó.
Jara remarcó que la Policía Nacional aplica sanciones cuando un conductor, ya de un vehículo particular o público, infringe las normas como, por ejemplo, pasarse una luz roja, manejar sin la licencia respectiva o detenerse sobre un crucero peatonal, entre otras faltas.