Una cancha de fulbito en Mariscal Cáceres, en San Juan de Lurigancho, fue escenario del asesinato de un jugador, frente a decenas de personas y que fue transmitido en vivo a través de las redes sociales.
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Marco Antonio Arbulú, de 25 años, se alistaba para reanudar un partido de fulbito con su equipo ‘Constructores’ cuando apareció un sujeto que aparentaba hablar por celular, cruza la cancha y, de un momento a otro, saca un arma y dispara.
El partido era grabado desde un celular y transmitido a través de las redes sociales. Gracias a las imágenes se ve el momento que el sicario llegar al lugar -acompañado de otro sujeto- y luego perpetra el crimen.
En total, la policía encontró 11 casquillos de bala y la familia del fallecido, conocido en la zona como ‘Pachu’, no quiso declarar y no dejó que la prensa grabara el lugar donde ocurrió el crimen.
Según la Policía, dos motos lineales participaron en el asesinato y se informó que uno de los sicarios ya habría sido detenido.