Eran las 9:00 a.m. cuando una banda de asaltantes llegaron en un taxi oscuro a la agencia del Banco de Crédito del Perú (BCP), ubicada en la Plaza Butters (Barranco), con la intención de asaltarla. Tres de ellos bajan de la unidad y esperan a que los trabajadores del banco ingresen al local.
Los maleantes portaban gorros y lentes oscuros para no ser reconocidos e iban armados con pistolas y revólveres. También, llevaban un maletín grande pues pretendían apoderarse de una fuerte suma de dinero.
Un minuto después reducen al vigilante —lo golpean con la cacha de una pistola en la cabeza— y luego maniatan a los siete empleados que ya estaban dentro del banco. Los asaltantes llevaban un maletín grande de color rojo, pues su intención era apoderarse del dinero de la bóveda.
Aproximadamente a las 9:03 a.m. obligan a la administradora a que abra la caja fuerte del BCP. Le apuntan con sus armas de fuego y la amenazan de muerte. Sin embargo, la bóveda, que es blindada, tenía un dispositivo (retardador) que hace que se abra luego de 9 minutos. Ante ello, los maleantes no pudieron consumar el atraco.
Mientras ello ocurría, una ciudadana, que se percató del asalto, alertó a un patrullero que pasaba por la zona. Inmediatamente, los efectivos activan la alerta y varias unidades motorizadas de la comisaria llegan al lugar.
Mientras tanto, en el interior del BCP, los tres asaltantes empiezan a desesperarse, pues la caja fuerte no abría. Es en ese momento, alrededor de las 9:06 a.m., en que varios agentes de la comisaría de Barranco irrumpen en la agencia bancaria y obligan a los asaltantes a arrojar sus armas.
Segundos después son reducidos y luego trasladados a la comisaria del sector, donde fueron identificados como Martín Eduardo Carranza Ramos (25), Brayan Junior Sandoval Rozas (22) y Rolando Gerónimo Lopez (23). Este último hampón tiene antecedentes policiales por sicariato y arresto domiciliario en su contra.