Redacción PERÚ21

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Era una noche como cualquier otra cuando Luis Enrique Javier Rojas ingresó junto a un amigo a una pollería de . De pronto, tres sujetos vestidos de negro ingresaron al restaurante, lanzaron amenazas a los dueños, e incluso golpearon a una mujer.

Cuando uno de ellos intentó arrebatarle sus pertenencias, el comensal de 40 años se resistió y recibió tres disparos en la cabeza. Ante el sonido, los vecinos del lugar salieron de sus casas y los hampones huyeron en una camioneta oscura, sin llevarse nada.

Pese a que se alertó al Serenazgo, los efectivos tardaron más de una hora en llegar. La víctima estuvo con vida varios minutos, pero no pudo resistir ante el retraso en el auxilio y murió.

Los moradores de la zona aseguran que se han producido seis asaltos a mano armada en la última semana, por lo que exigen mayor seguridad.