Redacción PERÚ21

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'Los Malditos del Tren de Aragua' saltaron ayer a las páginas policíacas por sembrar el pánico en la población peruana tras un sonado intento de asalto en el centro comercial , en Independencia.

Al menos uno de los cinco capturados pertenece a las filas de la temible banda delincuencial venezolana, según informó la  .  Se trata de Edison Agustín Barrera, alías 'Catre', un criminal con al menos seis asesinatos bajo la modalidad del sicariato y quien gusta de presumir y fotografiarse con las cabezas de sus enemigos.

La PNP también especula que los demás detenidos pueden ser integrantes de esta organización.

¿Pero quiénes son 'Los Malditos del Tren de Aragua'? Según información del portal Caraota Digital de Venezuela en abril de 2017,  esta banda se inició hace 15 años como un sindicato de trabajo de un prometido ferrocarril que se iba a construir en la zona de Aragua. Sin embargo, se dedicó al cobro ilícito de comisiones por la crisis de ese país.

Tras ser desactivado, sus integrantes se iniciaron en la extorsión como garantía de sus finanzas. También secuestran y asesinan, y hoy la conforman más de 500 aliados. Se especula que hasta la policía venezolana está en sus manos por los ultimátum que reciben de estos criminales.  

Son considerados una de las bandas de delito organizado más temidas de Venezuela, agrega Caraota Digital. Tocorón es su principal centro de operaciones. 

'Los malditos del Tren de Aragua' han sembrado el terror en el centro de Venezuela sin tener el poderío de la mafia mexicana, la cosa nostra italiana y sin contar con los millares de sanguinarios que la Mara Salvatrucha de San Salvador.

Distinguida como una banda vigorosa en la actualidad, el 'Tren de Aragua' —como se le conoce en Venezuela— parece enfrentarse a todo aquel que se le ponga en el camino.

De acuerdo al abogado criminalista Fermín Mármol García, el fin que tiene el 'Tren de Aragua' es idéntico al de otras organizaciones delictivas: Obtener enormes ganancias económicas y el aumento de su poder.

Además, cuentan con fuertes conexiones de antisociales en la cárcel de Tocorón, Venezuela, y poseen un equipamiento de guerra (fusiles, granadas, pistolas automáticas y escopetas) que superan al de los cuerpos policiales. Para engrosar sus filas, reclutan a la población más joven.

Infografía: CARAOTA DIGITAL / Fuente: Erlyn Carvallo, especialista en seguridad. Observatorio Venezolano de Violencia. Observatorio de Delito Organizado
Infografía: CARAOTA DIGITAL / Fuente: Erlyn Carvallo, especialista en seguridad. Observatorio Venezolano de Violencia. Observatorio de Delito Organizado

EL LÍDER Y SUS 500 ALÍADOS

El esquema interno de 'Los malditos del Tren de Aragua' sería como el de otras organizaciones con "soldados" recibiendo y cumpliendo órdenes y la cúpula con un gran líder.

“Ciertamente, necesitas un líder con suficiente fuerza que ejerza el monopolio de la violencia dentro de la banda para generar justamente los patrones de respeto requeridos para cohesionarla”, reconoce el sociólogo Luis Cedeño, director de la asociación civil Paz Activa.

Según Erlyn Carvallo, especialista en seguridad, la organización operaría bajo la modalidad del secuestro y con el apoyo de varias instancias. “Quien secuestra —llamado pegador— nunca siempre actúa solo sino en grupo. Una vez realizado el trabajo, entrega su 'trofeo' a los posibles 'guardadores' y 'enfriadores'”, declaró Carvallo para Caraota Digital.

Los 'enfriadores' serían familias completas que disponen los sótanos de sus casas para retener a la presa frente a menores de edad.

También coexistían con el 'Tren de Aragua', los 'gariteros', una especie de vigilantes de la zona que podría ser un vecino o alguien cercano. Pero la ejecución correría a cargo de menores de edad. 

"Esta organización cree funcionar como un Robin Hood de los pueblos, es decir, un benefactor que, con el dinero extorsionado, compra la conciencia de la comunidad, evitando así ser delatados. Esto lo hacía Pablo Escobar en Medellín, Colombia”, dijo el especialista en seguridad venezolana, Erlyn Carvallo Carvallo, a la web Caraota digital.

Sin embargo, no toda la colectividad estaría implicada en la actividad delincuencial del 'Tren de Aragua', algunos simplemente se adaptarían a la coexistencia para sobrevivir. 

Miembros del 'Tren de Aragua'. (Facebook)
Miembros del 'Tren de Aragua'. (Facebook)

¿DE DÓNDE VIENE EL NOMBRE DE TREN?

El nombre proviene del pseudo sindicato que trabajaba en la construcción del tren, hace 15 años, pero la obra no se terminó.

Con la realización de este medio de transporte se tenía la intención de unir el estado Aragua con Carabobo y luego con parte de Cojedes y Guárico. El trabajo estaba tutelada por el Instituto de Ferrocarril del estado Aragua.

Con este proyecto se iba a facilitar el traslado de mercancía, bienes y alimentos a las entidades centrales del país y conectar con Caracas, la capital venezolana.

“Resulta que este sindicato empezó a delinquir con el cobro de comisiones por puestos de trabajo. De ahí pasaron a la extorsión de contratistas y a las empresas de proveedores de materiales con cobro de comisión por entrega de materiales”, señaló Carvallo.

Entonces, la construcción del tren, que apuntaba a convertirse en una de las obras referenciales de la gestión del fallecido Hugo Chávez, se transformó en un foco de corrupción. Estaba trabajando un promedio de mil personas y establecían sus propias reglas.

Al quedar desactivado esta obra, la necesidad económica aumentó para los trabajadores y así comienzaron con mayor fuerza con las extorsiones y llegaron al punto de asesinar sin piedad a su víctimas.

Esta banda moderna usa Internet. Desde ahí revisan las redes sociales de sus potenciales víctimas y obtienen números telefónicos de las personas a las cuales les interesa llegar.

Tienen aliados en distintos organismos del Estado de Venezuela (Consejo Nacional Electoral y el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería) de donde obtienen información.

Infografía: CARAOTA DIGITAL / Fuentes: Psiquiatra Ana María Ríos. Sociólogo Luis Cedeño.
Infografía: CARAOTA DIGITAL / Fuentes: Psiquiatra Ana María Ríos. Sociólogo Luis Cedeño.