El exministro del Ambiente Antonio Brack consideró que algunos manifestantes y autoridades antimineras utilizan argumentos "inverosímiles y absurdos" para sustentar su rechazo a esta actividad en el proyecto Conga, en Cajamarca.
Explicó, por ejemplo, que es falso decir que no debe haber minería en cabeceras de cuenca, como reclaman quienes protestan contra Minas Conga, emprendimiento de US$4,800 millones que ha sido suspendido por la convulsión social. "(Decir eso) es inducir al error, porque el 98% de los proyectos mineros en Perú están en cabeceras de cuenca", dijo.
Brack Egg señaló también que mucho más contaminante que las aguas que utiliza la minería son las que provienen de los desagües y desembocan directamente en los ríos. "Que hagan su marcha del agua, pero que incluyan la gran contaminación que se hace del agua por las ciudades y pueblos que no tienen tratamiento de aguas servidas", dijo en entrevista en Willax.
Agregó que la ciudad usa 10 millones de metros cúbicos de agua, la agricultura 68 millones, y la minería solo emplea dos millones, por lo que las críticas a la actividad son desproporcionadas. "Si represamos o hacemos embalses se puede tener agua en abundancia. De ahí que el problema no es el agua, sino la gestión", sostuvo.