Un cadáver dentro de una bolsa fue tirado en una pista de San Juan de Lurigancho y los vecinos se percataron. Este suceso marcó el inicio del macabro caso de Luis Sergio Ramírez Santo, un joven de 19 años asesinado por sus secuestradores.
Testigos indicaron que la noche del viernes —a eso de las 19:30 horas— unos sujetos llegaron a bordo de un automóvil blanco, bajaron el cadáver de un station wagon y lo tiraron en la avenida Constelación. El cuerpo se encontraba dentro de una bolsa maniatado, en posición fetal, y presentaba cortes realizados con un arma punzocortante.Primero se pensó que era víctima de un asalto, pero luego la Policía confirmó que se trataba de un secuestro. La médico Niny Santos Portugal, madre del joven, dejó una denuncia en la División de Investigación de Secuestros (Divise) de la Dirincri.
La doctora detalló a la Policía que llegó a un acuerdo con los hampones y les realizó dos depósitos, uno de S/1,000 y otro de S/500. Todo esto en coordinación con el padre del estudiante, el ex juez Luis Ramírez Catacora (53). Pero no recibía información sobre el paradero de su hijo.Mientras las investigaciones continuaban, se supo que Luis Ramírez había sido asesinado por sus secuestradores. A la 13:00 horas del sábado, la madre llegó a la Morgue de Lima y, en medio de visible dolor, lo confirmó: "Sí, es mi hijo".
Luis Ramírez ya había sido asesinado cuando sus captores le exigieron 20 mil a sus padres para dejarlo en libertad, según confirmaron agentes de la División de Investigación de Secuestros de la Dirincri.Además, la Policía presume que el secuestro y asesinato del joven podría tratarse de una venganza.