Juan José Santiváñez juró el 16 de mayo como ministro del Interior. (Mininter)
Juan José Santiváñez juró el 16 de mayo como ministro del Interior. (Mininter)

Luego de contar a la prensa los nuevos resultados de su pomposo megaoperativo Amanecer Seguro, el último jueves, el ministro del Interior, , le cedió la palabra al jefe policial de la Dirección de Robo de Vehículos para que informara de la desarticulación de una banda. El siguiente en hablar, como mandaba el programa, iba a ser el titular de la División de Investigación de delitos de Alta Complejidad (Diviac), Franco Moreno. No obstante, el evento estaba por concluir y no le pasaban el micrófono. Tomó la palabra solo porque un periodista le hizo una pregunta directa.

Santiváñez escuchó a Moreno, retomó las declaraciones y se retiró raudo junto a los otros oficiales. La posterior escena era el coronel Moreno en solitario, en la sala de la Dirincri, mostrando a las cámaras la presentación que debía exponer con el ministro presente.

Franco Moreno es jefe de la Diviac. (Joma Gálaga/ Perú21)
Franco Moreno es jefe de la Diviac. (Joma Gálaga/ Perú21)

Ese suceso graficó la distante y tensa relación que no solo el titular del Interior mantiene con la Diviac, sino el propio gobierno de Dina Boluarte.

La mandataria le ha bajado el dedo a esa unidad de inteligencia por el mediático allanamiento de su vivienda, el pasado 30 de marzo, que dirigió el coronel PNP Harvey Colchado, suspendido de la jefatura de la Diviac.

La separación de Colchado, hoy relegado a tareas administrativas, fue solo el inicio de las represalias. El Ejecutivo ya ha emprendido la segunda fase de la venganza.

Desde el Ministerio del Interior se pretende anular el despliegue de esta división que desde su creación, en 2016, ha diseñado con autonomía las estrategias para desarticular a organizaciones criminales, muchas de ellas con políticos y funcionarios públicos como protagonistas.

Le baja el dedo

Santiváñez ha trazado un plan. Tres fuentes policiales indicaron a Perú21 que el titular del Interior quiere que la Diviac pase a depender de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) junto a las otras nueve divisiones especializadas.

Actualmente, la Diviac está adscrita a la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirnic), siendo una de las dos divisiones que responden a esa instancia. Es decir, con un coronel al mando. El resto de ellas tiene nivel de dirección, y son comandadas por generales.

De acuerdo al Decreto Supremo N° 026-2017-IN, promulgado en el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski, la labor de la Diviac es transversal, puede desarticular redes criminales de explotación sexual o las que se enquistan en la política. No distingue delitos.

Por eso, se puede ver a agentes de esa división investigando, a pedido del Ministerio Público, casos de minería ilegal, al Tren de Aragua o apoyando al Equipo especial contra la corrupción del poder (Eficcop). El único requisito para que la Diviac participe es que la indagación sea de alta complejidad.

Para sus operaciones, la Diviac recibe de la Dirección de Inteligencia (Dirin) entre 9 y 12 millones de soles anuales. Un promedio de 800 mil a un millón de soles mensuales.

Harvey Colchado fue suspendido por un proceso administrativo dentro de la PNP. (Foto: Julio Reaño / @photo.gec)
Harvey Colchado fue suspendido por un proceso administrativo dentro de la PNP. (Foto: Julio Reaño / @photo.gec)

En mayo pasado, a manera de crítica, el ministro Santiváñez exageró esa cifra y aseguró que ese dinero mensual era usado únicamente para apoyar al Eficcop, que por ese entonces consiguió la detención de Nicanor Boluarte, el hermano de la mandataria.

“Cuando Inspectoría (de la PNP) ha querido hacer justamente esa revisión (del presupuesto), hubo el impedimento por parte del Ministerio Público para ingresar a las oficinas del Eficcop y hacer ese control patrimonial”, sostuvo en Willax.

El Eficcop, liderado por la fiscal Marita Barreto, tiene en sus manos los principales procesos políticos. Propició la caída del expresidente Pedro Castillo y sus cómplices, y la de la exfiscal de la Nación, Patricia Benavides. Ambos con evidencias contundentes.

Ahora tiene pruebas de corrupción que implican a la gestión de Boluarte.

¿Qué sucedería si, de cambiarse la norma, la Diviac pasa al ámbito de la Dirincri? Lo primero es que ya no vería más casos de corrupción. Esa función la asumiría plenamente la Dirección contra la Corrupción (Dircocor), que es parte de la Dirnic.

En otras palabras, la Diviac dejaría de contribuir en las diligencias del Eficcop.

Se convertiría en una división más, como la de Robos, Secuestros o la de Estafas. De las que persiguen el delito común.

Pero, para degradar a la Diviac, tendría que haber argumentos sólidos que apunten a una inoperancia de esa división o a su uso político y direccionado.

En ese sentido, no resulta extraño que, en una entrevista de esta semana con el diario Expreso, el ministro Santiváñez advirtiera la “selectividad” que tendría la Diviac al apoyar casos penales.

“El Ministerio Público nos entregó una lista de casos de organizaciones criminales donde decía que la Policía le había negado la investigación argumentando que no tenía dinero para ejecutar los planes operativos (…) grande fue mi sorpresa cuando en la lista que me entrega el fiscal Jorge Chávez Cotrina todos los casos habían sido negados por la Diviac. Por eso nosotros podemos advertir que muy probablemente haya habido un tema selectivo y ya estamos investigando eso”, manifestó.

No obstante, fuentes cercanas al despacho del fiscal Chávez Cotrina negaron esa afirmación.

“La mayoría de los casos (rechazados) eran de la Diviac, pero también sucedió con diferentes unidades de la Policía. Todos nos han manifestado que no tienen recursos económicos; decir que todos los rechazos eran de la Diviac es una exageración”, aclararon.

Perú21 envió preguntas por escrito a Santiváñez sobre la propuesta que existiría para pasar la Diviac a la Dirincri y respondió escuetamente que “no existe dicho plan”. Aunque no desaprovechó la oportunidad para cuestionar nuevamente a esta unidad de inteligencia policial por la lista que entregó Chávez Cotrina.

“Durante los años 2019 a 2024 (la Diviac) ha recibido más de 72 millones de soles para la gestión de estos trabajos (…) resulta incongruente con los fines de investigación y la función policial a los que constitucionalmente se encuentra obligada la Policía Nacional del Perú”, insistió pese a que ha quedado establecido que no todos los rechazos eran de esa división.

Lo que está fuera de dudas es que la unidad que encabeza el coronel Franco Moreno no es del agrado del gobierno. Y eso lo sabe bien su equipo.