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UNMSM y alcalde Muñoz acuerdan no recortar terreno universitario
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En una maratónica sesión de diálogo, representantes estudiantiles de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y autoridades se sentaron ayer en la sede del Ministerio de Educación por más de diez horas para tratar los seis puntos del pliego de reclamo de los alumnos.
Hasta el cierre de esta edición, la reunión continuaba, pero se llegó a un acuerdo sobre tres puntos. El más importante de ellos en referencia a la construcción del cerco perimétrico de la universidad y la culminación del intercambio vial de las avenidas Universitaria y Venezuela, que implica una estación de la Línea 2 del Metro de Lima.
El alcalde de Lima, Jorge Muñoz; el rector de San Marcos, Orestes Cachay; el director ejecutivo de la Autoridad Autónoma del Tren Eléctrico, Carlos Ugaz; y los dirigentes estudiantiles firmaron un acta para acordar que la construcción de las obras “no recortará terrenos de la universidad”.
El documento, que leyó la ministra de Educación, Flor Pablo, señala que la Municipalidad de Lima se compromete a convocar un diálogo con los estudiantes para la elaboración del expediente técnico que sustente las obras.
No obstante, si bien este punto fue la génesis de la protesta de los alumnos de San Marcos, quienes desde el pasado martes mantienen tomado el campus universitario, los representantes estudiantiles señalaron que no levantarán la medida hasta que se llegue a un acuerdo sobre los demás reclamos.
“Estamos aquí para resolver el pliego integral”, dijo la estudiante de Derecho Kris Vidal, miembro de la junta directiva de la Federación Universitaria de San Marcos (FUSM).
ENTRE ELLOS
La ministra Pablo explicó que el tratamiento del resto de puntos será entre el rectorado y los estudiantes porque ya no estaba en la competencia de las demás autoridades.
“El ministerio ha asumido un rol de intermediación, pero la mesa se instala y en los otros puntos daremos asesoría técnica”, dijo la ministra.
En medio del diálogo, se llegó a tres acuerdos más que giran alrededor de la participación estudiantil.
Primero, que la universidad insistirá ante Sunedu para que las promociones de 2016 y 2017 obtengan el bachillerato automático, tras cumplir con la malla curricular.
Luego, que el vicerrectorado convoque a los estudiantes para la elaboración de un nuevo reglamento de procesos disciplinarios que “respete las libertades constitucionales” y que se archive el que rige actualmente, que según los alumnos “busca criminalizar la protesta estudiantil”.
Anoche, estaban entrampados en los puntos que implicaban la suspensión de la comisión que trabaja la modificación del estatuto de la UNMSM hasta las elecciones de los representantes estudiantiles en la Asamblea Universitaria, que se realizará el 1 de octubre.
Tras el acuerdo sobre el cerco perimétrico, la mediación del diálogo con los alumnos pasó a manos de Rolando Luque, adjunto de conflictos sociales de la Defensoría del Pueblo, y Alberto Huerta, jefe de la Oficina de Lima del mismo organismo.
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