El coronel alias ‘Conejo’, especialista en fugas, está con un pie en la cárcel

La vida pública de ‘Conejo’ tiene dos momentos claves con dos presidentes involucrados en hechos de corrupción en los últimos cinco años. El primero fue durante la gestión de Vizcarra y luego con el golpista Pedro Castillo.

El Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción en el Poder (Eficcop) ha podido reconstruir los eventos delictivos en donde Gonzales tuvo participación y que deberían ser de especial evaluación por el Poder Judicial, puesto que los más graves están relacionados con las últimas fugas más sonadas en el país.

En 2017, Gonzales se desempeñaba como jefe de la División de Búsqueda de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior. ‘Conejo’, para 2018, tenía un hombre de confianza llamado ‘Max’, quien era el mayor Manuel Arellanos. Dicha área recibió en aquella fecha la autorización para ser parte de un caso de interceptación telefónica que derivó en lo que hoy conocemos como los Cuellos Blancos del Puerto.

Días posteriores a la toma de mando de Vizcarra, las interceptaciones telefónicas permitían concluir que había un plan para que se lleve a cabo una reunión entre el flamante presidente y César Hinostroza, entonces juez de la Corte Suprema y cabecilla de Los Cuellos Blancos.

Con esta información en poder de Arellanos, y también de la fiscal del caso Sandra Castro, ambos decidieron hacérsela saber a Martín Vizcarra. A cambio de esto, el expresidente comenzó una relación de beneficio mutuo con la División de Búsqueda de la Digimin. “Martín Gonzales y Manuel Arellanos, un programa criminal valiéndose de su posicionamiento y acceso a la información a través de Digimin y el departamento Constelación (escuchas telefónicas) para encubrir y condicionar a las altas autoridades del Poder Ejecutivo de turno a cambio de permanecer en los cargos de Inteligencia del Ministerio del Interior”, señala el Eficcop.

Desde entonces, refiere un testigo de la Fiscalía, ‘Conejo’ entraba y salía de Palacio de Gobierno sin ser registrado. Sobre este policía pesa ahora un pedido fiscal de 36 meses de prisión preventiva.

El Eficcop señala que en octubre de 2018, el ex juez supremo César Hinostroza pudo fugar con ayuda de Digimin del Ministerio del Interior. Un informe de Inspectoría de la PNP de 2019 estableció que ‘Conejo’ tuvo responsabilidad administrativa en esta desaparición. El agente tenía la orden de vigilar la casa del magistrado, sin embargo, no ejecutó la misma dándole así a Hinostroza la facilidad para abandonar la capital. La sanción se le impuso, pero, como refiere el documento de Eficcop, esta prescribió.

Pasó un tiempo y Gonzales vio una nueva oportunidad de tener poder y control en un nuevo gobierno, el del lápiz de Pedro Castillo y Vladimir Cerrón. En el gobierno del golpista ‘Conejo’ llegó a convertirse en viceministro del sector Interior, pero para llegar allí tuvo que tranzar con lo peor del sombrero.

Ha sido el exministro del Interior de Castillo, Alfonso Chávarry, quien ha confirmado al Eficcop que fue el profesor quien lo llamó para ordenarle que Gonzales sea designado director de Digimin. Chávarry —narró— se opuso “por las malas referencias que tenía”, pero Castillo insistió. Al día siguiente, ‘Conejo’ llegó al despacho ministerial y se puso a disposición del ministro.

Una vez conocida la orden de detención preliminar para los sobrinos de Pedro Castillo, Fray Vásquez y Gianmarco Castillo, y el exasesor presidencial Bruno Pacheco, todos pasaron a la clandestinidad. Esta situación disgustó a Chávarry y sacó a ‘Conejo’ de la Digimin. Sin embargo, el profesor se enfadó, llamó al ministro y le dijo que ahora Martín Gonzales iba a ser viceministro del Interior.

Fray Vásquez ya capturado ha narrado a Eficcop que quien le avisó, un día antes de que iba a ser detenido junto a su primo, fue ‘Conejo’, y que gracias a su información pudieron evadir a la justicia.

La misma suerte tendría Juan Silva, exministro de Transportes y Comunicaciones, que hasta ahora permanece en la clandestinidad.