[Opinión] Patricia Teullet: ¿Atraer inversiones? Empecemos por casa

Lo que hace más inaceptable esta situación es el hecho de que disponemos de casi todos los elementos para seguir creciendo, pero tenemos un gobierno al que poco parece importarle la necesidad de hacer realidad inversiones que están listas y que solo esperan a que las trabas que enfrentan sean levantadas.

Lo increíble es que, a pesar de tener un país políticamente inestable, con pocas ganas de captar inversiones, sigue habiendo interés en sectores como el minero o el agrícola, además de infraestructura, para lo cual existe incluso un plan. Los proyectos existen, la voluntad de los privados también; incluso hay recursos disponibles para las obras públicas. Sin embargo, no logramos ese aterrizaje de las ideas y planes a la realidad.

Fue especialmente desalentador que, luego de que en Perumin se hablara de la importancia de sacar adelante los proyectos mineros, el primer ministro contradijera al ministro de Energía y Minas con relación a la realización del proyecto Tía María.

Es cierto que es un proyecto política y socialmente complicado, pero, para hacer tortilla, hay que romper huevos y es el gobierno el que debe dar las condiciones para que las inversiones se puedan llevar a cabo. Eso de que “estamos mejor que con Castillo” ya resulta insuficiente.

Supuestamente, uno de los motivos de los viajes de la presidenta es para atraer inversiones. ¿Qué va a responder cuando le pregunten por qué tantos proyectos siguen en cartera, con inversiones comprometidas, pero sin poder hacerse realidad? ¿Qué garantiza que los nuevos proyectos de inversión no corran la misma suerte? Como se dice: “Obras son amores y no buenas razones”.

Existe consenso entre los analistas respecto a que el deterioro en el país comienza en el gobierno de Ollanta Humala, pero ya ha transcurrido tiempo suficiente como para que vayamos enmendando. Hace tiempo que existe en el MEF un equipo a cargo del destrabe de los proyectos de inversión. ¿Cuáles son sus logros hasta el momento? Dejémonos de cosas: el Perú ni siquiera ha podido sacar adelante un centro comercial en el distrito de La Molina con todo listo para su inauguración. ¿Qué podemos esperar de proyectos mucho mayores y mucho más complejos?

Como siempre, mención especial merece el Congreso: ocupado en sistemáticamente deteriorar el sistema privado de pensiones, una fuente importante de recursos de inversión, ahora pretende complicar la contratación formal de trabajadores elevando la valla de las condiciones para la formalidad.

Antes de ir por el mundo a pedir nuevas inversiones, habría que mirar dentro de casa y hacer viables los proyectos y las inversiones que ya tenemos listos para su ejecución.