Día del pisco peruano: Conoce el plan de actividades para este día festivo

A continuación, expertos de Finca Rotondo te presentan tres opciones para festejar el Día del Pisco Sour un fin de semana.

Como es de costumbre, los primeros días de febrero diversos distritos realizan ferias o festivales que reúnen a los mejores productores y exponentes de pisco para compartir un momento cargado de sabores. Aquí los asistentes pueden disfrutar de degustaciones, shows en vivo y platos típicos. Asimismo, tienen la posibilidad de llevarse un pisco sour de su preferencia a casa.

Los viñedos son una buena opción para celebrar este día en familia. Estos lugares te brindan una experiencia vitivinícola de otro nivel. Aparte de la degustación, el guía te hace un recorrido donde te explica a detalle la cosecha de la uva y la elaboración especial de cada exquisito pisco. Uno de los viñedos que puedes visitar este fin de semana es el de Bodega Viña Vieja que se encuentra ubicado en la Av. San Cristobal S/N en el Distrito de Sunampe, Chincha. El ingreso es gratuito y te brindan un tour por toda la bodega.

Si se trata de una tarde de diversión, los bares son el lugar perfecto para pasarla con amigos. Estos se caracterizan por ofrecer una gran variedad de tragos, piqueos y música para amenizar el momento; pero, si estás buscando uno que te ofrezca el mejor Pisco Sour, el bar del Hotel Bolívar es tu mejor opción. Ubicado en el Centro de Lima, este bar sirve el famoso Pisco Sour Catedral, hecho a base del pisco quebranta de Finca Rotondo y el cual es considerado el mejor de Lima. Además, cuenta con una terraza con vista espectacular de la Plaza San Martín y otras construcciones arquitectónicas.

En el 2004, el Gobierno declaró el primer sábado del mes de febrero como el Día del Pisco Sour a nivel nacional. No pasó mucho tiempo para que, en el 2007, esta bebida también sea reconocida como parte del Patrimonio Cultural, haciéndole honor a nuestras raíces peruanas.

Según cuentan los historiadores, el Pisco Sour tuvo su primera aparición a principios del siglo XX en el entonces concurrido bar Morris, el cual había sido fundado en Lima por el inmigrante anglosajón Víctor V. Morris. Este bar ofrecía a su clientela su especialidad: el Pisco Sour, una bebida que estaba inspirada en el whisky sour.