Lo negó todo. Mario Vargas Llosa desmintió a su hijo Gonzalo y defendió a Isabel Preysler. El Nobel de Literatura se comunicó con El País, y no dudó en asegurar que sus nietas sabían de la presencia de su pareja en un evento de la Getty Foundation.
“El 11 de noviembre la Getty Foundation me honró con una medalla en la Morgan Library de Nueva York, en una cena a la que asistieron, además de mi hijo Álvaro y su esposa Susana, mis nietas Josefina, Aitana y Ariadna. Las tres sabían perfectamente que yo estaría acompañado por Isabel y yo mismo les advertí que habría fotógrafos en el acto”, explicó inicialmente.
“Me alegró que, pese a ello, las tres —que son mayores de edad— se empeñaran en asistir. Sugerir que cayeron en una emboscada o que ‘la señora Preysler’ se benefició económicamente con aquellas fotografías es una calumnia”, agregó.
“También es falso que Isabel no haya tenido gestos cariñosos con mis nietas. Hace muy poco, a pedido de ellas, las hizo invitar en Boston a un concierto de su hijo Enrique, quien las recibió y se fotografió con ellas. No haré ninguna otra declaración sobre este asunto”, dijo finalmente.
Tan solo ayer, Gonzalo Vargas Llosa, hijo del escritor, se comunicó con el diario El Mundo, y manifestó su enojo con su padre y su pareja, debido a que este no le habría dicho a sus hijas que Isabel Preysler estaría en un evento al que se les invitó.
Asimismo, señaló que Preysler se tomó una fotografía con sus hijas para recibir una remuneración, y “fingir” que eran unidas, y tenían una buena relación, cuando “no era verdad”.