Geraldine Bazán quiere voltear la página de lo que vivió con Gabriel Soto, de quien se separó tras años de matrimonio y dos pequeñas hijas. La actriz mexicana ya no quiere hablar de su separación y de su proceso de divorcio.
"Les había pedido una tregua, no tengo nada que decir y les pido que respeten nuestra privacidad”, manifestó a Univisión Entretenimiento.
UNA NUEVA VIDA
La actriz hizo un balance de cómo ha cambiado su vida y la de sus hijas tras su rompimiento con el famoso galán azteca.
“No es difícil, es cansado, claro que es cansado y uno a veces necesita 'time out' y un tiempo para ti misma y también me lo doy”, explicó la artista de 35 años de edad.
Mantenerse activa laboralmente, y a la vez criar a sus hijas sin la presencia de su padre, ayudaron a la actriz a salir del complicado trance. “Estoy contenta con lo que estoy haciendo, me gusta ser productiva y al contrario de querer tirar la toalla llego a casa feliz, llego a casa con ganas de compartir con mis hijas, de estar con ellas y de hacer la tarea, de dormirlas, de bañarlas porque en el día a día sólo somos nosotras. Te puedo decir que el estar trabajando y ser mamá me hace sentir completa”, precisó Bazán.
La artista, por estos días, participa en la telenovela 'Por amar sin ley', de Televisa.